Durante treinta años de carrera pasó de ser un entrenador de éxito en el Instituto Athens, con quienes fue subcampeón del estado, a ser un importante ejecutivo dentro de varias asociaciones y federaciones deportivas de ámbito nacional. Pero si por algo se le recuerda a HV Porter es porque, siendo editor de la revista de la Asociación de Institutos de Illinois, utilizó por primera vez la expresión que hoy en día más se utiliza en el mundo del baloncesto cuando llega la segunda semana de Marzo: "March-Madness." Y es que ya está aquí la locura del baloncesto universitario americano. Tras disputarse en Dayton lo que los americanos llaman "First Round", una última fase clasificatoria en la que ocho equipos intentaron conseguir los últimos puestos en el bracket final, ya tenemos a los últimos cuatro clasificados: la Universidad de Texas-San Antonio, la de Clemson, Virginia Commonwealth y la Universidad de North Carolina en Ashville. Con estos cuatro equipos hacen 64 que intentarán aguantar desde esta misma noche hasta la Final Four de Houston que se disputará entre los días 1 y 2 de Abril.
¿Favoritos? Según el Presidente Obama, la Universidad de Kansas del entrenador Bill Self, a quien ayuda en el banquillo, por cierto, Danny Manning. Las estrellas del equipo son los gemelos Marcus y Markieff Morris. Y son los grandes favoritos para prácticamente la mayoría. Todo el mundo parece coincidir en que la cosa estará entre ellos y la Ohio State de Thad Matta, que ha sido nombrado al premio Naismith como mejor entrenador del año (también está en la terna Dave Rose, entrenador de Brigham Young). Ohio State ha sido este año noticia por la aparición del freshman Jared Sullinger, próxima estrella de la NBA, pero el trabajo de David Lighty, William Buford y Jon Diebler también es muy importante. Junto a estos dos, algunos aún dan posibilidades a los eternos chicos del Coach K. Los de Duke cuentan con la baja de Kyrie Irving, para algunos mockdraft candidato a uno de los tres primeros puestos del draft, que se lesionó en la jornada ocho y aún no ha vuelto. Nolan Smith y Kyle Singler están haciendo un gran trabajo para que nadie se acuerde de ellos. También apuntan muchos como protagonista en Houston a los de Pittsburgh, con un trío muy potente formado por Ashton Gibbs, Brad Wanamaker y Gilbert Brown. Y, unos pocos, también dicen que hay que contar con los de Conneticut. La temporada de Kemba Walker ha sido espectacular.
Nadie parece contar este año con los que fueron protagonistas el año pasado, como Tennessee, Baylor, Kentucky o West Virginia. Nadie nombra a las estrellas del año pasado, Butler, ya que la baja de Gordon Hayward no parece que haya sido cubierta del todo con Shelvin Mack y Matt Howard. Me sorprende que la Kentucky del turco Enes Kanter, Terrence Jones o Brandon Knight no esté en el bombo de favoritos. Tampoco están Wisconsin ni Louisville, sorprendentemente. Ni la North Carolina de Harrison Barnes ni la Arizona de Derrick Williams, al que muchos colocan en el primer puesto del próximo draft. Por supuesto, tampoco cuenta mucho Kwahi Leonard en su San Diego State.
Así que las cosas parecen estar bastante claras.
¿Este blog?
No está Creighton, eso ya lo sabemos todos, pero por supuesto que, a falta de estos, este blog seguirá el campeonato y con especial interés. Nuestros candidatos, como siempre, son sentimentales y, por lo tanto, no nos hagáis caso si alguien se atreve a hacer una porra o le llaman los de la ESPN para que participe en la suya. Por supuesto, seguiremos con atención lo que hagan lo sycamores de Indiana State, por ser compañeros de conferencia. Jake Odum y Aaron Carter intentarán pasar al menos la primera ronda. Cuando caigan, pasaremos a animar a la Universidad de Nevada Las Vegas por afinidad laboral, si es que no han caído ya. Y cuando nos quedemos sin candidatos, por descontado, los mormones de Brigham Young y la metralleta Fredette serán nuestros grandes candidatos. Si nos fallan, y ya que este año no son candidatos, usaremos como último recurso a la Michigan State de Tom Izzo.
Go Las Vegas Go!!!
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