Fanzine deportivo literario. Crónicas caprichosas sobre héroes y villanos del mundo del deporte
miércoles, 8 de septiembre de 2010
Milos Teodosic
Estaba fácil hoy, ¿verdad? Lo que dice Scariolo: estaba delante de un tío más alto que él, a ocho metros, y se ha cascado el triple. Solo queda felicitarle.
Había algo extraño en los ojos de los jugadores serbios. Un hambre inquietante, cercano a la locura. Krstic tenía la misma mirada que le causó un chichón a Boroussis. Velickovic tenía la furia recogida en el colorete de las mejillas. Keselj había ganado tres centímetros de musculatura en el brazo solo con saltar a la cancha.
Y ninguno de ellos ha ganado el partido: lo han ganado Savanovic y Teodosic. Precisamente, los dos que también lo podían haber perdido. Los dos que no compartían gesto con sus compañeros. Savanovic, con un extraño parecido al actor Michael Cera recién levantado de la cama, parecía divertirse jugando el solo a imitar a Billy Elliott. Teodosic, con su aspecto desaliñado, de resacón, imbuido en un mundo propio y narcótico, se ha despertado un solo segundo, un solo salto, un solo giro de muñeca que ha mandado a España de vuelta a casa.
No se puede decir nada, tú. Podían haber ganado cualquiera de los dos equipos, así que el que lo ha hecho se lo merece. El abuelo Ivkovic ha sabido volver a sacar magia de la chistera. Dijimos en el europeo que volveríamos a hablar de ellos, y ya está, Teodosic, Velickovic, Keselj, Rasic, Markovic, Krstic, Savanovic, Perovic... y los que no han participado, Pekovic, Macvan, Marjanovic... Los IC están de vuelta si es que alguna vez se fueron.
Pero lo bueno ha estado al otro lado del Mediterráneo, en la península, en un país sin salida al mar. El principado de Andorra ha asistido a la victoria de Igor Antón en la estación de esquí de Pal. Mosquera va a acabar por odiar al Euskaltel. Pero, aquí también, el que ha ganado se lo ha merecido tanto como el que ha quedado segundo. Antón, siempre inquieto pero prudente, ha dado una lección de serenidad, que sumada a la fuerza de sus piernas, nos hacen templar la euforia a los aficionados vascos al ciclismo.
Y me quedo aquí, tú, que se me está acabando la batería. Menos del cinco por cierto, a ver si me da tiempo a colgar una foto de Teodosic con esa barba descuidada y esa mirada ausente.
HC!!! Que a este paso gano la porra esta q te has currado!!!
ResponderEliminarCabrón, pues te voy a dar un regalo como sea así... ¿Estuvisteis en Lasesarre, por cierto?
ResponderEliminarSí q estuve, jako y yo estuvimos ahí dándolo todo por nuestro club. La primera parte fue lamentable (aunque a jako tampoco le pareció tan mala), la segunda estuvo bastante mejor. Por cierto, no sé si habrás visto el segundo gol pero es un golazo del copón. Ya tienes el carnet nuevo? Es que ahí sí que dan un regalo...
ResponderEliminarshiuNo tengo el carné nuevo, ¿hay que pagar ya? Ni me había enterado
ResponderEliminarCreo que no has nombrado al nuevo del Tau, ¿no?. Que también parece un desaliñado. Bjelica, que metió 14 puntos. Yo le vi meter unos buenos triples.
ResponderEliminarSaludos.
Álvaro.
Ya me había dado cuenta, ya. Pero esperaba que nadie estuviera tan puntilloso. No tiene la misma pinta que Teodosic y Savanovic, Bjelica es más guapito. Ya tienen recambio las jóvenes vitorianas para Simas Jasaitis y Tiago. Aunque ahora I tiene un nuevo elegido, Ante Tomic.
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