viernes, 18 de septiembre de 2020

Tom Leezer




Que sí, que se está terminando el Tour. Mira que no hay ahí para hablar, pero ¿por qué íbamos a hacerlo?, si tenemos poco que añadir. Nuestra opinión, poco más. Y eso está sobrevalorado últimamente. Así que, en lugar de hacerlo de la actualidad, vamos a hablar del pasado, aunque uniéndolo con lo que pasa ahora. 

 

Y es que, si nada se tuerce, el Tour de Francia lo va a ganar Primoz Roglic. O, más bien, el Jumbo-Visma, el equipo de un Merijn Zeeman que, para su desgracia, ha ocupado hoy mismo el porcentaje de publicidad que hubiera rechazado de saber que la razón para conseguirlo fuera la que ha sido: que le han expulsado del Tour por propasarse, al menos verbalmente, que no he querido leer los detalles, con un juez o técnico de la organización que reclamaba investigar la bicicleta del que va a salir campeón, mañana, en La Planche des Belles Filles (qué nombre más curioso e intrigante). Al menos, eso le consolará. Eso, y el absoluto dominio de su equipo, al más puro estilo Sky-INEOS, controlando la carrera, imponiendo un ritmo frenético, aniquilando incluso los intentos de ataque de sus rivales y terminando las partes empinadas con exhibiciones de equipo. No será solo el Tour de Francia de Primoz Roglic. Lo será también de Sepp Kuss y Wout Van Aert, sobre todo, y, en general, del resto del equipo: George Bennett, Amund Grondahl Jansen, Tony Martin, Tom Dumoulin y Robert Gesink. Gesink y Tom Dumoulin son holandeses, ya lo sabemos, y la prueba visible de la gruesa línea, en este caso genealógica, que une a este equipo de colores gualdinegros con aquel que usaba los de la bandera española a pesar de ser neerlandés y, sobre todo, con el azul y naranja de un equipo histórico, el Rabobank. Un equipo con más de 35 años de historia que ha pasado por muchos cambios nominales pero que siempre ha estado a la cabeza del ciclismo en los Países Bajos. 

 

La historia cuenta que el equipo fue cosa del campeón del mundo en 1979 Jan Raas, quien, a la postre, se convertiría no solo en el fundador del mismo, como quien dice, si no en su posterior director, dirigiendo el crecimiento de un equipo que nació, en 1984, cuando el equipo en el que corría Raas, el TI-Raleigh, se partió en dos, por, al parecer, disputas entre el corredor estrella, el propio Raas, y el director principal, Peter Post. Algunos se fueron con Post al Panasonic. Otros, siguieron a Jan Raas en el recién formado Kwantum-Decosol, de maillot blanco con los esponsors sobredimensionados en una gruesa franja que combinaba los colores rojo y amarillo. Entre los primeros directores de aquel nuevo equipo, por cierto, se encontraba el belga Walter Godefroot, corredor de éxito (etapas en Tour, Giro y Vuelta, campeón de Bélgica, 2 Tour de Flandes y una Lieja-Bastón-Lieja y 1 París-Roubaix) que luego se convertiría en director del Telekom de los Bjarne Riis, Jan Ulrich, Andreas Klöden y Erik Zabel. Raas se retiraría pronto y pasaría a dirigir el equipo, un equipo donde se encontraban corredores que darían muchos éxitos al equipo como Adrie Van der Poel, Jelle Nijdam, Ludo Peeters o el histórico Joop Zoetemelk, ganador de una Vuelta a España y de un Tour de Francia, donde también fue segundo hasta en seis ocasiones, y el campeón del Mundo más veterano de la historia con 38 años y cuatro meses más que Alejandro Valverde. Pronto, pasarían a ser conocidos, por motivos de esponsorización, como Superconfex-Yoko, otro nombre curioso donde los haya, destacando corredores como Edwig Van Hooydonck, Frans Maassen, el alemán Rolf Golz o un Jean Paul Van Poppel que se hartaría a ganar pero duraría poco. Después se llamarían Buckler, aún con Jan Raas de director, y destacando corredores como Eric Vanderaerden, Steven Rooks, quien también se iría a las primeras de cambio, o el debut de un corredor importante en el futuro, Erik Dekker. Pasarían a llamarse WordPerfect y Novell, y entre jóvenes como Michael Boogerd y Leon Van Bon y corredores más rodados como Viatcheslav Ekimov y Djamolidine Abdoujaparov seguirían cosechando éxitos. Fue en 1996 cuando Rabobank pasaría a convertirse en patrocinador principal, y símbolo de la época dorada del equipo, la que va de 1996 a 2012, antes de que el banco decidiera retirarse por no ver ensuciado su nombre con los problemas de dopaje que sacudieron el año 2013. A partir de ahí, comenzaría un baile de nombres que termina en el Jumbo-Visma actual. Antes fueron Blanco (2013), Belkin (2013 y 2014) y LottoNL-Jumbo (2015-2018). En los años de Rabobank (1996-2012), esta larga historia llegaría a sus grandes éxitos, con dos victorias finales en grandes vueltas, la Vuelta de 2007 y el Giro de 2009, ambas conseguidas por el ruso Denis Menchov, además de dos triunfos en la Copa del Mundo como mejor equipo de la temporada (en 1999 y 2001). Solo lo que están consiguiendo ahora, con la Vuelta 2019 de Primoz Roglic y su posible Tour de Francia este domingo, conseguiría igualar e incluso superar lo que se consiguió en aquella época dorada del Rabobank. Una época en la que además de los corredores mencionados arriba, los Denis Menchov, Erik Dekker, Michael Boogerd o Leon Van Bon que vestirían de azul y naranja, también lo harían corredores, en una buena mezcla de talento nacional e internacional, como Óscar Freire, Johan Bruyneel, Erik Breukink, Robbie McEwen, Patrick Jonker, Peter Luttenberger, Max Van Heeswijk, Beat Zberg, Marc Wauters, Matthew Hayman, Steven de Jongh, Levi Leipheimer, Tejay Van Garderen, Michael Matthews, Robert Hunter, Pedro Horrillo, Michael Rasmussen, Mauricio Ardila Cano, Juan Antonio Flecha, Laurens ten Dam, Juan Manuel Gárate, Luis León Sánchez, Mark Renshaw, Carlos Barredo, Matti Breschel, Nick Nuyens, Bram Tankink, Graeme Brown, Maarten den Bakker…

 

Pero bueno, por enredar aún más nuestro estilo naturalmente rebuscado para encontrar temas, no era en realidad del Rabobank, y mira que lo hemos hecho, de quienes queríamos hablar, sino del equipo de desarrollo que fundaron en 2002, uno de los primeros que hubo, que luego se multiplicaron, y que últimamente han vuelto a recuperar los equipos World Tour, incluyendo al Team Jumbo-Visma. El Jumbo-Visma Development Team que dirige el alemán Robert Wagner, disputa ahora la categoría continental y cuenta con una plantilla de trece corredores, nueve holandeses, dos alemanes, un neozelandés y un irlandés, y donde ya han podido destacar corredores como Gijs Leemreize (1999) y Olav Kooij (2001) que, el año que viene, al parecer, subirán de categoría y correrán con el primer equipo, por decirlo de alguna manera. 

 

Antes de todo esta nueva estructura de formación, hubo otra, entre 2002 y 2016, que alimentó al equipo holandés y al pelotón internacional con un montón de corredores prometedores que acabaron, en algunos casos, por cumplir lo que prometían. Los resultados de aquel equipo de desarrollo del Rabobank aún son visibles en el pelotón internacional, igual que aún se puede ver la labor de promoción del ciclismo vasco que se llevó a cabo aprovechando la existencia del Euskaltel-Euskadi, con corredores como Ion Izagirre, Gorka Izagirre, Mikel Landa, Mikel Nieve, Peio Bilbao o Romain Sicard destacando en el ciclismo de hoy a pesar de la desaparición de aquel proyecto de élite (que no del equipo). Lo mismo pasa en Holanda con el Rabobank y su equipo de desarrollo. La labor y los frutos de aquel equipo aún son visibles en el pelotón, a pesar de haber terminado con su trabajo hace un lustro. 

 

Alguno de esos corredores que salieron de la cantera del Rabobank, están ahora en su sucesor, el Team Jumbo-Visma. Gente como Antwan Tolhoek (1994), Steven Kruijswijk (1987), Robert Gesink (1986), Jos Van Emden (1985), Tom Dumoulin (1990), Lennard Hofstede (1994), Mike Teunissen (1992) y Timo Roosen (1993), hoy en el equipo de Primoz Roglic, comenzaron su formación en aquel equipo de desarrollo del Rabobank. El año que viene, al parecer, se sumará a todos ellos uno más, ya que otro canterano del Rabobank, Sam Oomen (1995), parece que cambiará el Sunweb por el Jumbo. De hecho, en el Jumbo-Visma también está Bert-Jan Lindemann (1989), quien igualmente correría el equipo de cantera del Rabobank, pero lo hizo ya algo más talludito, y habiendo sido profesional antes con equipos como el Vacansoleil. No son los únicos corredores de aquella estructura que aún permanecen en equipos World Tour: en el Trek están Koen de Kort (1982), Pieter Weening (1981) y Bauke Mollema (1986); el australiano Rory Sutherland (1982) y Rick Zabel (1993) en el Israel; Serge Pauwels (1983) en CCC; Ramon Sinkeldam (1989) en el FDJ-Groupama; Tejay Van Garderen (1988) y Moreno Hofland (1991) en el Education First; Rohan Dennis (1991) y Dylan Van Baarle (1992) en el Team INEOS; Martijn Tusveld (1993), Joeris Niewenhuis (1996) y Cees Bol (1995) en el Team Sunweb, donde también estaba y está Wilco Kelderman (1991), pero parece que la temporada que viene correrá para el BORA-Hansgrohe. Un escalón por debajo, en la categoría UCI ProTour, podríamos encontrar a los dos hermanos Van Poppel, Boy Van Poppel (1988) y Danny Van Poppel (1993), que corren juntos en el Circus-Wanty, donde hay otro canterano más del Rabobank, Wesley Kreder (1990); en Francia, en el Vital Concept, está Tom-Jelte Slagter (1989); en Dinamarca, en el Riwal, encontramos hasta tres más:  Martijn Budding (1995), Piotr Havik (1994) y Nick Van der Lijke (1991); por último, en el Burgos corre Jetse Bol (1989) y en el Alpecin-Fenix belga está el holandés Oscar Riesebeek (1992). Finalmente, también en la última categoría del ciclismo profesional, encontramos algunos ejemplos como Jesper Asselman (1990), que corre en el Metec-TKH holandés; Coen Vermeltfoort (1988), al que encontramos también en Holanda, corriendo en el VokerWessels-Merckx; Michaël Van Staeyen (1988) está en el Tarteletto-Isorex belga; Jasper Bovenhuis (1991) está en el Vlasman Cycling Team que dirige Ton Welling; en el A Bloc CT de Paul Tabak está Ivar Slik (1993); y, finalmente, en China, en el SSOIS Miogee Cycling Team corren Jeroen Meijers (1993) y André Looij (1995), donde son compañeros, entre otros, del español Edgar Nohales y del uruguayo, ex del Caja Rural, Fabricio Ferrari. 

 

En resumen, si ahora mismo Rabobank decidiera volver al ciclismo y recuperar a todos sus corredores de cantera, podría formar un ocho para las grandes vueltas que no tendría que envidiarle mucho a otros equipos del actual UCI World Tour. La selección es mía, e igual no es la más apropiada, pero da una idea de la calidad de aquella cantera, incluso hoy en la actualidad: Tom Dumoulin, Bauke Mollema, Rohan Dennis, Dylan Van Baarle, Cees Bol, Sam Oomen, Steven Kruijswijk y Antwan Tolhoek, quedándose fuera gente como Robert Gesink, Rick Zabel, Serge Pauwels, Tejay Van Garderen o Jos Van Emden. 

 

Si con esto no fuera suficiente para reconocer la labor de formación que se hizo en aquellos años, añado una nueva lista. En esta ocasión, estos corredores ya no están en activo, pero todos ellos pasaron por la cantera del Rabobank y corrieron en aquel Development Team: Hans Dekkers, Michiel Eljizen, Ryder Hesjedal (ganador del Giro en 2012), Joost Posthuma, Laurens ten Dam, Thomas Dekker, Bernhard Kohl, Jukka Vastaranta, Lars Boom, Stef Clement, Marc de Maar, Mathieu Heijboer, Kai Reus, Tom Stamsnjider, Dmitry Kozontchuk, Tom Veelers, William Walker, Huub Duyn, Rick Flens, Martijn Maaskant, Rob Ruijgh, Dennis Van Winden, Martijn Keizer, Michel Kreder, Klaas Lodewyck, Theo Bos, Brian Bulgaç, Barry Markus, Marc Goos, Marco Minnaard, Kevin de Weert o un Daan Olivier que se retiró dos veces, una vez para estudiar y otra porque las lesiones no le dejaron aprovechar su vuelta. El último de esta lista sería un Tom Leezer (1985) que, en realidad, aún debería seguir en la anterior, la de los activos, porque el actual corredor del Team Jumbo-Visma sigue pedaleando, aunque ha anunciado su retirada para la temporada que viene a sus 35 años y tras toda una carrera, desde 2005, en la misma estructura. Se retira con muy pocas victorias, la última data de 2013, cuando ganó una etapa en el Tour de Langkawi, pero ha llegado a correr dos Vueltas, cuatro Tours y dos Giros, siempre haciendo labor de equipo. Por ser el último en anunciarlo, que quién sabe si habrá más antes de que termine la temporada, a él le vamos a dedicar el título de esta entrada. 

 

Antes de terminar, también se puede recordar que, en este equipo satélite que la estructura del Rabobank comenzó en 2002, también se promocionaron otras especialidades, con tal éxito, sobre todo en el ciclocross, que en 2010 decidieron doblar el esfuerzo y crear el Rabobank-Giant OffRoad Team, que recogiera y trabajara con más atención esta parcela. Así, por este equipo, pasaron corredores como Richard Groenendaal, Sven Nys, Bart Aernouts, Sven Vanthourenhout o Lars Van der Haar. Entre los cinco, acumulan, por ejemplo, 17 medallas en el Campeonato del Mundo de ciclocross. El holandés Groenendaal fue campeón del Mundo de ciclocross en 2000 y subcampeón en 1994 y 1995, antes, había sido campeón del Mundo junior en 1989; su compatriota Lars Van der Haar también lució de joven, siendo campeón del Mundo de ciclocross en categoría su23 en 2011 y 2012, pero nunca lo llegó a ser en categoría absoluta, como si lo fue Groenendaal, aunque llegó a ser una vez segundo, en 2016, y dos veces tercero, en 2013 y 2015. Los otros tres son belgas. Probablemente, Bart Aernouts sea el menos laureado de todos ellos, pero también tiene un hueco en este palmarés, ya que, en 2000, llegó a ser campeón del Mundo junior. Su compatriota Sven Vanthourehout lo fue en sub23, en el año 2001, y había sido subcampeón en categoría junior en 1999. No consiguió los mismos resultados en la categoría mayor, pero llegó a obtener dos medallas de bronce, en 2004 y 2005. El que mejores resultados consiguió, sin duda, fue Sven Nys, el Canibal de Baal (De Kannibaal van Baal), uno de los mejores corredores de ciclocross de principios del siglo XXI, y quien, por cierto, ha encontrado un sucesor en su familia, ya que su hijo, Thibau Nys, es el actual campeón del Mundo junior. Nys senior fue campeón del mundo sub23 en 1997 y 1998 y absoluto en 2005 y 2013. No fueron sus únicas medallas, ya que llegó a ser subcampeón en 2011 y 2014, y tercero en 2002, 2004, 2008, 2009 y 2010. Ninguno consiguió grandes éxitos en ruta, Nys, actualmente director en el Telenet-Fidea Lions, ganó el trofeo Jong Maar Moedig (también lo han ganado gente como Tom Boonen, Thomas de Gendt o Tim Declerq) y Lars Van der Haar ganó una etapa en la Oerösterreichrundfahrt de 2014, una carrera austriaca que han ganado corredores como Leopold König, Patrick Konrad o Gregor Mühlberger. Poco bagaje si tenemos en cuenta el impacto que tienen hoy en la ruta ciclocrossistas como Zdenek Stybar, Mathieu Van der Poel y Wout Van Aert. 


Posdata: Sí, no voy a cambiar ni una coma. El error está ahí y lo dejo bien claro para que se vea. Tampoco va a pasar nada, que esto lo escribe quien lo escribe y lo leéis cuatro gatos, a los que respeto y les agradezco su fidelidad, pero pocos sois y sabéis de qué va esto. Es lo que pasa por escribir como escribo. Me dejé llevar por la opinión generalizada y di, como muchos, la victoria de Roglic por segura, lo veis claramente ahí arriba. No lo voy a esconder. Lo que pasó luego fue historia del ciclismo ya. Y contento de haber visto el espectáculo en directo. El resto da un poco igual, aunque, si algún seguidor incondicional de Tadej Pogaçar se dio por ofendido, lo siento. 



domingo, 6 de septiembre de 2020

Thomas Pidcock

Imagen tomada del buscador de imágenes de google aunque según rezaba ahí, proviene de
la web Revista Mundo Ciclistico. Se ve a Pidcock entrando vencedor en Aprica.

 


Lo llaman Baby Giro, Girobio, Giro Sub 23 u, oficialmente, Giro Ciclistico d'Italia. Acaba de terminar y se ha disputado en estos días, al mismo tiempo que se disputaba, y se sigue disputando, el Tour de Francia. Dejó de disputarse entre 2013 y 2016, pero ya son cuatro ediciones consecutivas desde ese parón, y esta edición del Giro para jóvenes valores se ha convertido en un termómetro de talento para futuros corredores que puedan dominar el pelotón profesional en los próximos años.  

Siempre fue esta competición un buen vivero de futuros ganadores. Solo con mirar el palmarés histórico, nos encontramos con varios corredores que después triunfarían en las versiones mayores de las competiciones de tres semanas: Francesco Moser (1 Giro), Giovanni Battaglin (1 Giro y 1 Vuelta), Marco Pantani (1 Giro y 1 Tour), Gilberto Simoni (2 Giros) o Danilo Di Luca (1 Giro). Y entre los que no ganaron pero estuvieron en el pódium, encontraríamos más: Fabio Aru (1 Vuelta), Ivan Gotti (2 Giros) o Gianni Bugno (1 Giro).

Todos los mencionados son italianos. Y es que, de las 43 ediciones disputadas, 26 triunfos finales han correspondido a corredores del país. Sin embargo, una mirada más profunda deja ver un toque internacional. Rusia ha ganado nueve ediciones, por ejemplo, si contemplamos las siete victorias de corredores bajo la bandera de la Union Soviética. Eso sí, entre ellos había corredores como Andrei Teteriuk, kazajo, y Piotr Ugrumov, letón. Dainius Kairelis lo ganó después, pero ya bajo la nacionalidad lituana. Pavel Sivakov y Aleksander Vlasov fueron los dos últimos corredores rusos en alzarse con la victoria. Tres colombianos se han llevado el triunfo final, todos en el siglo XXI, pero ya otros como Gonzalo Marín, Norberto Cáceres o Carlos Julio Siachoque quedaron entre los tres primeros en los años 70 y 80 del siglo pasado. En las ediciones de 2017 y 2018, de los seis puestos de honor entre los tres mejores, tres australianos se repartieron su porción, aunque ninguno ganó: Jai Hindley, Robert Stannard y Lucas Hamilton. Joseph Dombrowski le dio hace unos años el primer triunfo a Estados Unidos.

El último italiano que ganó esta carrera fue Mattia Cattaneo en 2011. Antes que él lo ganaron otros corredores con peso en el pelotón como Francesco Casagrande, Leonardo Piepoli, Wladimir Belli o Dario Cataldo. El año pasado, tres colombianos coparon el pódium final, todos ellos profesionales hoy en día: Andrés Camilo Ardila (UAE Team Emirates), Einer Rubio (Movistar) y Juan Diego Alba (Movistar). 

Este año, Thomas Pidcock se ha convertido en el primer británico en triunfar en esta disputada y meritoria prueba. Lo ha hecho por delante del primer belga en pisar el pódium, Henri Vandenabeele. El tercer puesto ha sido para un corredor italiano, Kevin Colleoni. Pidcock, Vandenabeele y Colleoni se suman a la lista de corredores jóvenes que han destacado en las últimas ediciones y que aspiran a protagonizar el ciclismo profesional del futuro: los colombianos mencionados y otros como Lucas Hamilton, Pavel Sivakov, Joao Almeida, Aleksander Vlasov... Y solo nos fijamos en los que han acabado entre los tres mejores de la clasificación final. 

Thomas Pidcock, nacido en Leeds en 1999, ya era un nombre de futuro que sonaba entre los aficionados al ciclismo. Al fin y al cabo, ya había ganado la París-Roubaix en sub23 y en categoría junior, había sido Campeón Mundial junior contra el reloj y sub23 de ciclocross, además de haber estrenado ya su palmarés profesional con victorias, incluida la general, en el Tour de Alsacia, una prueba 2.2. en el circuito europeo de la UCI que, entre otros, han ganado corredores como Thibaut Pinot, Wilco Kelderman, Maximilian Schachmann, Geoffrey Bouchard o el mismo Lucas Hamilton. 

Pidcock ha corrido el Giro sub23 con Trinity Racing Team,  equipo de ciclocross que dirige el belga Kurt Bogaerts y el irlandés Andrew McQuaid, formado para acoger el renovado talento del país en esta especialidad. Pero antes corrió en profesionales con el Team Wiggins de Bradley Wiggins, de donde han salido gente como Mark Donovan (Team Sunweb) o Gabriel Cullaigh (Movistar). Su victoria ha sido contundente. La web Zikloland lo resumía explícitamente: "es el justo vencedor del Giro de Italia sub-23. No ha tenido rival". Ya había ganado dos etapas antes y no soltaba el maillot de líder desde la cuarta, pero cimentó su victoria final en una última etapa muy exigente que terminó en Aprica y que incluía la subida al Mortirolo. En esa última etapa perdió el pódium otro talento italiano como Giovanni Alleotti y lo ganó el belga Henri Vandenabeele. 

El ciclismo vasco nunca se ha asomado mucho por esta competición. El mayor éxito fue el pódium de Joseba Albizu (2º) en 2002. Este año, ha destacado Jokin Murgialday, 8º en la clasificación final. El joven talento del Caja Rural es hijo de Javier Murguialday, un gregario alavés de lujo que tuvo su momento de gloria en Pau, al triunfar en una etapa del Tour de Francia por delante de un joven Richard Virenque. Seguro que su hijo aspira a emularle algún día. Por delante de Murguialday en la clasificación final del Giro sub23 quedó Alejandro Ropero (7º), del Kometa, quien también ganó una etapa y fue líder. El resto de los triunfos parciales, además de los tres que acaparó Pidcock, se los llevaron los italianos Jonathan Mian y Luca Colnaghi, este en dos ocasiones, además de la etapa que consiguió el belga Jordi Meeus.

En una reciente retransmisión del actual Tour de Francia, Félix García Casas, ex corredor profesional y actualmente en el organigrama del equipo Kometa de Alberto Contador e Iban Basso, invitado al programa para comentar la carrera, explicaba cómo ha habido un cambio de tendencia y los equipos UCI World Tour cada vez buscan el talento más joven. Hemos pasado de casos como el de Tony Rominger, que debutó como profesional con 25 años, al de Remco Evenepoel, profesional sin cumplir los 20 y ya rindiendo y ganando. Tadej Pogaçar, Egan Bernal... La juventud manda. Los watios y los datos mandan. Al mismo tiempo que el Giro sub23 y el Tour de Francia, se disputaban más pruebas. En la Settimana Coppi e Bartali, prestigiosa prueba italiana, por ejemplo, un joven talento del equipo de cantera del Jumbo, Olav Kooij, nacido en 2001, sorprendió a propios y extraños al llevarse una de las victorias parciales. Lo hizo por delante de otro joven, Ethan Hayter, nacido en 1998, quien, el año pasado, se llevó dos etapas en la edición del Giro sub23. 

Lo dicho, el pelotón rejuvenece, los equipos buscan cada vez antes el talento y su explotación, y, además, los territorios se diversifican. Si, en los últimos años, Colombia había renacido, parece que otros mercados como el holandés y el belga reclaman ahora su cuota de éxito y, en el futuro, será el británico el que lo exija. Corredores como el ganador final de esta edición del Giro sub23, Thomas Pidcock, y otros como Jake Stewart, Ethan Hayter, Calum Johnston, Thomas Gloag, Gabriel Cullaigh, Mark Donovan, Leo Hayter, Lewis Askey, James Knox, Charles Quarterman, Scott Davies, Ben Tulett o Matthew Holmes aspiran a darle protagonismo a un país que ya lo ha tenido, y mucho, estos últimos años, con los Simon Yates, Chris Froome, Bradley Wiggins, Geraint Thomas y compañía. De hecho, sus triunfos, todos llegados ya en edad madura (Yates ganó su primera grande con 26, Froome con 31, Wiggins con 32 y Thomas con 32) sean probablemente una razón importante para que ahora Gran Bretaña disfrute de esta nueva generación.