jueves, 8 de julio de 2010

LeBron James


Dicen los expertos que este era el verano más esperado de la historia de la NBA. Se comenta que los extraños movimientos que muchos equipos hicieron en veranos pasados, tenían un solo objetivo: los límites salariales para este año. Y es que, sobre el papel, los jugadores que podían entrar en traspasos durante este verano era para asustar a cualquiera: LeBron James, Dwayne Wade, Chris Bosh, Amar'e Stoudamire, Joe Johnson, Dirk Nowitzki, Carlos Boozer, Paul Pierce, Ray Allen, Shaquille O'Neal, Kenyon Martin, Zydrunas Ilgauskas, Yao Ming, Derek Fisher, Michael Redd, Peja Stojakovic, Allen Iverson, Richard Jefferson, Mike Miller o Kyle Korver entre otros. Prácticamente, todas las estrellas menos Kobe Bryant, Kevin Garnett, Dwight Howard, Chris Paul, Tim Duncan, Tony Parker o Carmelo Anthony. Aunque este último ha aparecido en la rumorología. Y la rumorología ha apuntado casi siempre a los mismos equipos, los Nets rusos, los Cavaliers desesperados, los Knicks a lo loco, los Bulls con prisas o los Clippers sin rumbo. La tendencia está llevando a todos estos jugadores a renovar con sus equipos, parece que ya lo han hecho Dwayne Wade, Dirk Nowitzki, Paul Pierce, Ray Allen, Yao Ming, Kenyon Martin o Peja Stojakovic. Y es que, al final, muchas veces todos estos movimientos no son más que maniobras en busca de mejoras de contrato.
Sin embargo, el epicentro de este terremoto de rumores se producirá a lo largo del día de hoy, mientras los americanos cuentan las horas para que a las tres de la madrugada de nuestro reloj el jugador más poderoso físicamente, LeBron James anuncie a bombo y platillo, en directo y con toda la parafernalia digna de su figura y del dinero que produce, el equipo que ha conseguido camelarlo al final. Serán los petrodolares de los Nets, el sentimentalismo de los Cavs, la sombra de Jordan en Chicago, una campaña de apareamiento comercial sin precedentes orquestada por los Knicks o la locura de un equipo en Florida que, según los últimos rumores, pretende reunir a Bosh, Wade y James en un equipo que jugará bajo el patrocinio de Florentino Pérez y con tres balones por partido. ¿Quién será? ¿Qué será? Redoble de tambores... ¡Mañana lo sabremos y el mundo seguirá girando después de aguantar la respiración durante unos segundos!
Mientras tanto, los Lakers esperan tomándose una cerveza en la terraza con los pies sobre la mesa. Los Celtics repiten proyecto y van pasando los años y muchos secundarios como Rudy, Miller, Korver, Fisher o los Thomas esperan para poner la puntilla a plantillas que parecen buscar rizar el rizo sin mantener los pies en el suelo.
Para terminar, una reflexión. En el año de la crisis mundial que parecía hacer temblar la economía liberal, y luego parecía terminar de golpe y ahora parece prolongarse sin fecha de caducidad, ¿qué podríamos hacer con las primas de los jugadores de fútbol del Mundial y con los contratos que todos esos jugadores se van a poner a firmar en las próximas semanas? No quiero caer en un debate fallido y manido, pero no deja de retumbar en el fondo una vocecilla que repite esa pregunta una y otra vez. En fin, será que me hago mayor. Y, por cierto, en Septiembre llega el Mundial y todos esos jugadores estarán tostándose en la playa. Será el Mundial de las bajas, pero, muy probablemente, será el Mundial de las nuevas figuras, y eso es de agradecer.
Ya vale por hoy, que creo que llevo ya tres entradas de golpe. A seguir sudando con este maldito calor. Salud.

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