domingo, 22 de octubre de 2017

Vasyl Kravets



Robert Prosinecki, Meho Kodro, Darko Kovacevic, Alen Peternac, Davor Suker, Robert Jarni, Miroslav Djukic, Predrag Mijatovic, Elvir Baljic, Faruk Hadzibegic, Predrag Spasic, Veljko Paunovic, Milinko Pantic, Savo Milosevic, Vladimir Gudelj, Mauro Ravnic, Elvir Bolic... El fútbol balcánico siempre tuvo un hueco en las ligas profesionales españoles. 

Generalmente, siempre se ha tirado más de países como Argentina o Brasil, pero no queda duda de que los países que formaban la desaparecida Yugoslavia también fueron un buen caladero para los equipos profesionales de la liga española. Aún quedan en primera unos cuantos, a día de hoy: los croatas Ivan Rakitic, Sime Vrsaljko, Luka Modric, Mateo Kovacic, Alen Halilovic; los serbios Nemanja Maksimovic, Darko Brasanac, Sasa Lukic, Marko Dimitrovic, Aleksandar Katai, Filip Manojlovic, Antonio Rukavina o Nemanja Radoja; el bosnio Ermedin Demirovic; el montenegrino Stefan Savic; el esloveno Jan Oblak; o el Macedonio Enis Bardhi. Son, además, jugadores, en buena medida, importantes. 

Lo que quizás sorprenda un poco más es que el número también es alto en la segunda división. El número de jugadores extranjeros en la segunda categoría del fútbol nacional ha ido en aumento, pero, casi siempre, se ha optado por los mercados que ya hemos mencionado anteriormente. Sin embargo, hoy en día, también encontramos muchos jugadores balcánicos en la llamada Liga 1/2/3. Ahí juega, por ejemplo, serbios como Rajko Brezancic, lateral izquierdo de 28 años, que llegó al Huesca desde Holanda; el delantero del Spórting de Gijón Stefan Scepovic, quien, a sus 27 años, ya ha jugado en equipos como la Sampdoria, el Brujas, el Celtic de Glasgow, el Partizan o el Getafe; Filip Malbasic, del Tenerife, un extremo de 25 años que también ha jugado en Alemania; en el Córdoba juegan hasta tres compatriotas, Igor Stefanovic, portero de 30 años, Sasa Markovic, centrocampista de 26 años y Sasa Jovanovic, también centrocampista, de 25 años; Dejan Lekic juega en el Reus a sus 32 años, y en España ya ha jugado en Osasuna, Girona, Eibar, Spórting o Mallorca. La segunda división también cuenta con un jugador de Montenegro, Ivan Kecojevic, 29 años, del Cádiz; un esloveno, Matej Pucko, del Oviedo, que tiene 24 años; y un macedonio, Stole Dimitrievski, portero de 24 años que juega en la Gimnástic de Tarragona. 

Normalmente, la liga ha mirado al fútbol europeo para incorporar, sobre todo, ha jugadores de los campeonatos que también tienen competiciones domésticas de alto nivel: Alemania, Francia, Italia, Inglaterra, Portugal, Holanda y/o Bélgica. Pero el número de jugadores de otros países europeos con menos tradición como extranjeros en España o con ligas de menor potencial también es alto. 
En primera división, encontramos, por ejemplo, a los daneses Simon Kjaer, Michael Krohn-Dehli, Riza Durmisi, Daniel Wass o Andrew Hjulsager; los rumanos Alin Tosca y Florian Andone; el eslovaca Stanislav Lobotka; el sueco John Guidetti; el polaco Przemyslaw Tyton; o los suizos Fabian Schär y Zdravko Kuzmanovic. También en segunda división nos encontramos a jugadores suizos, dos en el Zaragoza: Oliver Buff, de 25 años, y el más veterano, 29 años, Simone Grippo. También suecos, en este caso, uno, de 32 años, y cobrando del Lorca FC, Markus Holgersson. Y un polaco, Pawel Kieszek, de 33 años, que juega en el Córdoba. Otro jugador nacido en un país europeo con poco número de extranjeros en España, aunque de allí vino Ferenc Puskas, es el húngaro Patrick Hidi, que juega en el Oviedo y tiene 27 años. Por último, dos ucranianos y tres georgianos. De Ucrania, llegaron a la segunda división, el defensa del Lugo de 20 años Vasyl Ruslanovych Kravets, y el delantero del Albacete de 28 años Roman Vyacheslavovych Zozulya. Y de Georgia, todos con 22 años, Giorgi Papunashvili, del Zaragoza, Otar Kakabadze, del Gimnástic; y Giorgi Aburjania del Sevilla B. 

Si quieres que, después de hacer todo este recuento, llegue a alguna conclusión... Pues bueno, diremos que sigue la tendencia a buscar talento fuera de casa y, explotados ya algunos mercados, hay que buscar en otros que se abandonaron o en los nuevos. No sé si es una buena conclusión, pero bueno. 

Le damos el titular a Vasyl Ruslanovych Kravets porque, de todos los que hemos mencionado (viniendo de segunda división, vamos a fijarnos en los que menos visibilidad tienen) es el más joven. Kravets es una promesa del fútbol ucraniano que ha salido muy pronto de su país. Si mis datos son correctos, debutó con la selección de su país a muy temprana edad, después de pasar por otras categorías inferiores. Apenas jugó una quincena de partidos en el Karpaty Lviv y fue cedido al Lugo. Tiene 20 años, miedo 1'83 y llegó al Lugo en el mercado de invierno de la temporada pasada. No hay que confundirle con Artem Kravets, delantero de la misma nacionalidad pero con el que no sé si guarda parentesco, y que, la temporada pasada, jugó en el Granada cedido por el Dinamo de Kiev, a donde ha regresado este año. 





No hay comentarios: