viernes, 13 de marzo de 2009

Bobby Hurley

¿Qué tienen en común los siguientes jugadores de baloncesto? Chris Burgess, Shane Battier, Elton Brand, Grant Hill, Christian Laettner, Trajan Langdon, Corey Magette, Crawford Palmer, Cherokee Parks, Carlos Boozer, Luol Deng, Chris Duhon, Daniel Ewing, Mike Dunleavy, Dahntay Jones, Josh McRoberts, Shavlick Randolph, Shelden Williams o JJ Redick. Luego os lo cuento. Cuando llegué a los Estados Unidos se estaban jugando las series finales de béisbol. Jugaban los Yankees contra otro equipo. No me enteraba de nada. Alan intentaba explicármelo y me decía quiénes eran los jugadores buenos y quiénes los duros. La serie fue tan interminable que ni me acuerdo de quien ganó. Antes de irme, me dio tiempo a vivir el March Madness. Prácticamente todos los días había un partido televisado. Daba igual quién fuera la universidad que jugaba, el estadio estaba lleno y la gente animaba como si fuera un Olympiakos-Panathinaikos con el título de la Euroliga en juego. En aquellos días, vi tres partidos seguidos de la misma universidad, y encontré a mi jugador preferido: JJ Redick. Lo curioso es que jugaba en la misma universidad en la que jugó el único jugador de baloncesto al que conocí antes de dar el salto al campo profesional: Bobby Hurley. Los dos jugaron en la Universidad de Duke y eso es lo que tienen en común todos los jugadores que puse en la lista de arriba, una lista un poco caprichosa que solo atiende a que son jugadores, bien porque hayan jugado en la NBA o en Europa, que conozco yo.
Bobby Hurley era un base eléctrico. Siempre parecía que le estaban pinchando por detrás. Aún tiene el récord de asistencias en la Liga universitaria. No era espectacular, pero llevaba el ritmo del partido como le daba la gana. Con él, Duke ganó dos títulos consecutivos. Al poco de llegar a la NBA, con los Kings de Sacramento, la ciudad donde Marshall ocultó el oro que había encontrado porque intuyó que la gente se volvería loca y acabarían con su fructífero negocio, se metió la ostia con el coche. Le quedaron lesiones crónicas y con 26 años tuvo que retirarse después de jugar una temporada sin éxito en los Vancouver Grizzlies. Ahora, creo, se dedica a la cría de caballos de carrera, pero no descarta entrenar en el futuro, seguro que su padre, un reputado entrenador de instituto, podrá darle grandes consejos.
JJ Redick juega ahora en los Orlando Magic. Algún partido bueno sí que le ha salido, pero, en general, está muy abajo en la rotación y ya no le buscan al salir de los bloqueos. En la NCAA era todo un espectáculo verle jugar: pequeño, rápido, inquieto, mortal en la salida del bloqueo, su tiro de tres era letal. Si entraba en racha, podía noquear a cualquiera. Era el típico jugador al que Krzyzewski, entrenador de Duke y actual seleccionador nacional, sabía sacarle todo el jugo.
Bobby se quedó a medio camino, como Cherokee Parks, Grant Hill (en menor medida), Laettner o Burgess. Los próximos, al parecer, serán Greg Henderson y Kyle Singler. Aún están a tiempo gente como Shelden Williams, Luol Deng o incluso Josh McRoberts, que, por lo menos, en el juego de la NBA para ordenador se sale. Lo que está claro es que la cantera de los Blue Devils es inagotable.
Va un video. No he encontrado nada interesante de Hurley, así que cuelgo uno de un partido en el que Redick metió 40 puntos, la emocionante final ante Georgetown.

No hay comentarios: