De vez en cuando, te fijas en los nombres de los que firman las noticias. Tendría que dedicar más tiempo a esta entrada si quisiera ser rigurosa y correcta, pero no lo voy a hacer, porque tampoco tengo tan altas pretensiones. Sin embargo, me voy a permitir soltar la rajada: el periodismo deportivo, en general, está en horas bajas. Tampoco creo que haya sido para tanto, ¿no? Más aún, cuando, hoy en día, todo está en horas bajas, que es una expresión muy socorrida... a la par que distinguida (esta broma solo la entenderá uno y no funciona mucho fuera del Carrefour, pero bueno).
Hay unos pocos nombres que saltan a la palestra en cuanto quieres hacer una lista con lo mejor del periodismo deportivo escrito (estoy hablando todo el rato del escrito, apenas escucho la radio y de la televisión tengo por costumbre no hablar, como los entrenadores de fútbol con los árbitros, ya me entendéis) Otro paréntesis, va: (se podría dedicar todo un blog a los periodistas deportivos de la cadena Cuatro, que creo que también son los de la SER, ¿no?, pero no creo que sea el más apropiado para hacerlo). Quizás, como decía, de todos esos nombres recurrentes, el más que requeterecurrente es el de Santiago Segurola quien, tampoco, merece ser reseñado con una simple entrada y hablar de él daría lo mismo para alegrías que para penas. Además, parece ser que es del pueblo.
En fin, periodistas buenos, los hay, y muy buenos, con criterio, ética, ingenio, cierta dosis de rebeldía y buena prosa. Hoy quería hablar de eso mismo, y como, generalmente, las únicas crónicas que leo son las de ciclismo, los cronistas a los que me gustaría alabar son periodistas deportivos que escriben sobre ciclismo. Los hay que saben de qué escriben, como Iñaki Benito o Josu Garai, también Alain Laiseka, de DEIA, a quien además se le nota que le gusta escribir de ello, y, en especial, el que escribía antes de él, Unai Larrea, que escribía desde dentro, subido a la bicicleta. Inigualable toda la crónica de aquella Vuelta al País Vasco que Mayo le robó a Frigo en un descenso espeluznante. Pero, para mí, en mi modesta opinión, que además de componerse de curiosidad y afición por el deporte, se complementa con mi oficio, por ahora, y hasta que se acabe el contrato, unido por naturaleza a la literatura, el mejor de todos ellos es Jesús Gómez Peña.
No he realizado la investigación suficiente como para ser concluyente en mis afirmaciones. Ni leo tantos periódicos, ni leí los de hace años, cuando, cuentan, los cronistas prestaban más atención a la forma, que no quiere decir que no lo prestaran también al contenido.
Jesús Gómez Peña es un periodista que, generalmente, se encarga de las noticias ciclistas de El Correo, periódico que antes era vizcaíno, ahora, ya, con todo esto del Grupo Correo y de las grandes empresas de comunicación, uno no sabe qué queda de aquel periódico. Gómez Peña, además de escribir unas deliciosas crónicas semanales ( o casi semanales) sobre las rutas de entrenamiento de los ciclistas profesionales, periodismo de investigación, porque Gómez Peña escribe después de correr la ruta acompañado del protagonista, tiene un estilo especial y literario a la hora de escribir sus crónicas. Un estilo con un imaginario especial, que va más allá del ciclismo pero siempre vuelve a él. Le gustan las frases cortas, los sintagmas, la expresividad del lenguaje materializado en gotas de lluvia, en ruido de piñones, en sudor o en carreteras escarpadas que descollan hacia el cielo. Yo no soy bueno, ya se ve claramente, pero él sí. No he conseguido ningún ejemplo en internet, así que tendréis que esperar a que vuelva a escribir. Quizás lo hace para todos los periódicos de El Grupo Correo, no lo sé. Si tenéis la oportunidad y casualmente está inspirado, disfrutaréis, porque aunque es barroco a veces, no es pedante ni se regodea, y siempre abusa, con salud, de metáforas socorridas que con precisión dibujan lo que Gómez Peña vio, lo que va más allá de los brazos en alto bajo la pancarta de meta, la belleza del ciclismo y el deporte en general.
Y ya está. De Patxi Alonso, nuevamente, ya hablaré cuando haya comido ligero y esté descansado.
5 comentarios:
http://especiales.elcorreo.com/tour-francia-2010/noticias/2010-07-16/purito-rodriguez-primera-victoria-espanola-1727.html
Aquí hay un ejemplo. Totalmente de acuerdo. Gómez Peña es un fenómeno.
HAces mención en tu entrada a la forma que tiene Gómez Peña de escribir. Curiosamente, cuando no hace cróncias de ciclismo, escribe de otra manera. Más normal, con menos sintagmas cortos. Yo tengo una toría, que no sé si compartirás: Gómez Peña escribe sobre ciclismo buscando con las frases el ritmo de las pedaladas. Cada vez que leo sus crónicas, y lo hago todos los días durante las grandes vueltas gracia a El Norte de Castilla, tengo siempre esa sensación.
Le estoy siguiendo durante este Tour de Francia y es uno de los mejores periodistas deportivos que he leído. Sus crónicas son magníficas y muy entretenidas.
Gómez Peña, nos traslada con su prosa sugerente al corazón de la ruta, nos traslada la emoción de cada asalto en la carrera, nos hace vivir la etapa con notas de historia épicas que enmarcan el espectáculo del pedahace hervir la sangre de los que estamos enganchados al pedaleo
HOLA! quisiera saber donde puedo comprar el libro Mi vuelta.Astorqui en Bilbao. Gracias
Publicar un comentario