Parece que se le acaba el contrato con Rácing de Avellaneda hoy y no renovará, así que con 2010, se acaba la carrera deportiva del central argentino. Y como andaba un par de días buscando un nombre propio con el que escribir la última entrada del año, qué mejor que la despedida de un central duro y expeditivo, como no lo ha sido este blog en 365 días, pero que al fin y al cabo ha ganado la Liga española, la italiana, la UEFA y ha sido internacional en 115 ocasiones. Casi 100 entradas más que partidos ha jugado Ayala con la albiceleste he tenido el placer de escribir yo este año.
Aún con dudas repetinas y ataques suicidas, el blog ha sobrevivido gracias a la inercia, la pasión por el deporte tanto en directo como en diferido (en pasivo) y el apoyo de los visitantes asiduos y accidentales de este blog.
A todos ellos, tanto a los que hacen comentarios como a los que asoman por aquí en silencio, os deseo unas felices fiestas y un buen fin de año. El año pasado celebramos el último día con una reunión atlética en Rekalde a la que no podré asistir este año. La rodilla ha dicho basta desde que me dio por ir corriendo desde Santurtzi hasta Bilbao por toda la orilla. Representantes de pormaratones estarán allí, así que probablemente abramos el blog con resaca, pero con la habitual crónica navideña de la San Silvestre.
No soy amigo de recapitulaciones, pero me queda una sensación dulce, ahora que se aproximan las últimas horas del año. Este blog nació con vocación experimental, creció con la fragilidad de los proyectos indefinidos y lleva ya camino de convertirse en un anciano vacilante. Así ha sobrevivido un año que al bloguero principal se le ha hecho empinado y costoso. En cualquier caso, como ha pasado con la vida personal en general, me quedaré con los buenos momentos, que los ha habido, incluso en la experiencia excitante y fascinante en la que se convierte mantener un blog sin caer en la rutina y el aburrimiento.
En fin, que mucha suerte para el año que se viene encima, ánimo a los que corren, juegan, luchan, leen, rien, lloran y disponen de unos minutos para leer este blog y como decimos en mi pueblo, zorionak eta urte berri on!, y como decimos en mi curro, merry christmas and a happy new year! y como decimos en mi lengua materna, ¡felicidades y próspero año nuevo! A pasarse con el champán, a hacer promesas que no cumpliremos y a disfrutar de la familia y los amigos. Nos vemos de regreso en unas horas, pero estrenando nuevo año.
¡Que gane el mejor y que sea en justa lid!