viernes, 30 de abril de 2010

Tyreke Evans


Tenía una entrada preparada desde Lisboa para analizar el comienzo de los play-off de la NBA. Ya es tarde. Más de la mitad de los equipos ya están clasificados para la siguiente ronda. Además, iba a ser una chapa de tres pares de cojones para, en total, no decir nada interesante.
Viva el cinismo.
Pendientes aún de tres eliminatorias, ya hay cinco equipos clasificados. Dwight Howard y los suyos no tuvieron piedad del equipo de Michael Jordan, como era de esperar. Demasiadas bajas en los de Charlotte. Los Celtics también se libraron rápido de Miami, por mucho que Wade se hubiera hecho ilusiones con la llegada del otro O'Neal y del novato Beasley. Son muchos perros viejos en Massachussets aunque a alguno como Rasheed Wallace le hayan dado tabardillos esta temporada (lo de su jugada, que no pude colgar en el blog, me pareció todo un acto poético). Por no hablar de los tabardillos de Kevin Garnett que resulta que se han descubierto de golpe y porrazo. Chicago y su base Derrick Rose no puedieron hacer nada ante Lebron James, como estaba cantado, que apenas ni se ha despeinado y entran con descanso en la siguiente ronda. Y Nate McMillan demostró que no sabe como hacer ganar a su equipo ante unos Phoenix Suns que están apunto de cerrar un ciclo pero aún tienen talento para pasar rondas.
La última eliminatoria resuelta, la que enfrentaba a Mavericks y Spurs, ha sido todo un espectáculo de baloncesto, del bueno y del malo. Ver a Nowitzki, Butler, Ginobili, Parker y Duncan dando lo mejor de su baloncesto, algunos ya en horas bajas que se resisten a serlo, ha conseguido que la eliminatoria no quedara resumida a un espectáculo de golpes, contactos, heridas de guerra, encontronazos, encaramientos, gestos huraños, declaraciones subidas de tono y todo un lenguaje bélico que ha encarecido la victoria. Una victoria que al final se han llevado los Spurs para dolor del enésimo proyecto fracasado de Mark Cuban.
Queda por saber si Bryant despertará por fin y ayudará a Gasol a librarse del pegajoso Durant. Los de Oklahoma, con cuatro jóvenes de auténtico lujo como Harden, Ibaka, Durant y Westbrook darán mucho que hablar en el futuro si consiguen mantenerlos juntos, y el más mediático de todos ellos, Kevin Durant, apunta a futuro relevo en el estrellato de los Kobe Bryant, Lebron James y Dwayne Wade. También queda por saber si los mormones cortarán las alas a Carmelo Anthony y compañía en la eliminatoria más igualada y reñida. Apuesto por Sloan y los suyos, pero los de Colorado son un equipo competitivo que puede aspirar a todo. Lástima que George Karl no pueda estar con ellos. Por último, el equipo romántico (romántico para mí porque siempre me ha parecido un equipo gris y este año tiene una plantilla que me gusta) tendrá que sobreponerse a las bajas del australiano Bogut y de Michael Redd para superar al equipo de los jugones, los Hawks. La serie la lideran los Bucks gracias a una buena remontada y el trabajo de Ilyasova, Delfino, Jennings, Salmons y Ridnour. Los últimos partidos (si es que hay dos) serán de infarto y cuidado con los brincos de Smith y los triples a la desesperada de Crawford y Johnson. Horford seguirá haciendo el trabajo más cabal.
Y el título de la entrada es para el mejor rookie de la temporada en la NBA, un Tyreke Evans que ha conseguido lo que quería a base de hartarse a tirar, penetrar y salir en la tele mientras su equipo perdía partido tras partido para desesperación de un Sergio Rodríguez que acabó fuera y de un Chapu Nocioni que aguantó hasta el final pero ya piensa en si le apetece cruzar el charco o no la próxima temporada.

jueves, 29 de abril de 2010

Carlos Sergio


El diario DEIA publicaba hoy un artículo que creo que yo ya escribí en una entrada. Sergio, un reconocido entrenador de cantera vizcaíno, era una de las cabezas visibles de aquel proyecto deportivo-educativo que durante los años finales del siglo XX se llevó a cabo en Fadura, Getxo, aunque era un proyecto mucho más ambicioso y tenía otras sedes. Empezó en Barcelona, pero luego siguió en el País Vasco y Galicia y era un proyecto a caballo entre la Federación Española de Baloncesto, las federaciones autonómicas y otras instituciones regionales. El reportaje se centra en el repaso que Carlos Sergio hace de los frutos que este proyecto dio en Getxo. En el reportaje, se nombra a los más famosos, como Saúl Blanco, Fran Vázquez, los dos Urtasun, Dani López, Ruiz de Galarreta, Jon Kortaberria o Sergio Rodríguez, que han debutado en ACB y siguen intentando hacer carrera en distintos equipos profesionales. Pero también se nombra a otros que no pudieron llegar tan lejos pero estuvieron apunto, como Jan Orfila, Javi Alvarado, Joseba Iglesias o Iker Trevijano. No se dice nada del doloroso final, porque aún recuerdo la lucha de los padres de estos chavales que confiaban en la labor, académica y deportiva, que se ejercía en este proyecto.
El baloncesto español lleva años de contínuo crecimiento, en gran parte gracias a la labor de los equipos de cantera tradicionales, como el Barcelona, el Joventut o el Estudiantes, por la tremenda labor de la Federación Española y su equipo técnico, pero también por proyectos como éste que se detuvieron y ahora se puede disfrutar sus resultados. A los Gasol, Navarro, Cabezas, Raúl López, Garbajosa, Mumbrú y compañía, los relevaran los Rubio, Marco, Rabaseda, Aguilar, Mirotic, Servera, Tomás o Suárez, algunos ya lo están haciendo. No dejan de salir nombres, pero muchos ya salieron y salieron del Polideportivo de Fadura. Es de justicia reconocer el trabajo que se hizo en aquellos días.

Ángel Vicioso


En realidad, quiero hablar de otro, pero como ya he utilizado su nombre en el blog, aprovecho y hablo de paso del aragonés Vicioso. Ellos dos son los triunfadores de la jornada, porque mientras que el de Alhama de Aragón ganaba y le quitaba el liderato a Pablo Urtasun en Asturias, Mark Cavendish conseguía su segunda victoria de la temporada en el Tour de Romandía. Hay mucha distancia entre Gijón y Friburgo y mucha más entre el palmarés y el talento de estos dos esprinters, pero también la ha habido y la habrá entre la educación y el comportamiento de ambos. Mientras Vicioso celebraba su victoria con una amplia sonrisa y los brazos en alto, a Cavendish se le ocurría lanzar un corte de mangas (en los países anglosajones usan los dedos de distinta manera a como lo hacemos aquí pero el significado de una peineta que decía Luis Aragonés es la misma en todos los sitios) para todos sus detractores, que según el de la Isla de Man son muchos y todos están en su contra porque el mundo es así, no le entienden ni le comprenden ni saben apreciar que él es un fuera de serie. ¿Se me nota?
Vicioso es otro que ha tenido que sufrir los vaivenes de sus equipos, su presunción de inocencia y sus estados de forma. En prácticamente una semana se ha llevado una etapa en Asturias, el Gran Premio de Llodio y la singular Vuelta a la Rioja. No son sus primeras victorias ni mucho menos. El aragonés es un vasco de adopción en lo que se refiere a laureles, porque entre Bicicleta Vasca, Vuelta al País Vasco, Klasika de Primavera, Llodio o Gran Premio Miguel Indurain, ya le podemos llamar Aingeru Biziotsu. De Cavendish ya hablé. Este año solo lleva dos, pero las multiplicará y por mucho, seguro. Espero que al menos, ya haya saciado su sed de gilipolleces con su corte de manga y sus palabras en rueda de prensa donde explicó que no tenía mejor manera de "enviar un mensaje a los comentaristas y los periodistas que no saben una mierda sobre ciclismo". Que alguien le regale un iphone, por favor.

Tolo Calafat


Esta mañana he ido a correr. Ayer evité el calor, así que esta mañana tenía pensado probar con una media maratón. Rodeos por la ciudad hasta el pulmón oculto de El Regato y vuelta con más rodeos hasta casa. No he podido. A los cinco kilómetros, en Gorostiza, he tenido que parar. El calor, la espalda y una extraña melancolía que no me deja descansar estos últimos días me han hecho parar. He descansado un par de minutos y he vuelto a arrancar, pero de vuelta a casa. Otros cinco kilómetros al trantrán y una sensación de fracaso al llegar a casa. He encendido el televisor.
Ahora truena lejos. Aún no se ha puesto a llover. Se oyen voces en el patio del colegio y a los coches frenar en el cruce. Pero yo solo oigo la tormenta avanzar sin que nadie le preste atención. Y esa tormenta me ha llevado más lejos. Muchos kilómetros más lejos. A 7.500 kilómetros de altura.
Aún recuerdo las crónicas sobre el fallecimiento de Iñaki Ochoa de Olza. Aún resuenan en mi cabeza y hoy entran más voces sin avisar. Llevo media hora leyendo blogs, el de Fernando J. Pérez e Iñigo Muñoyerro, el del Grupo SSM, prensa, declaraciones, ecos de una montaña tan alta que parece estar muy lejos de esta calle calurosa donde la lluvia empieza a condensarse en el cristal de las ventanas. No me quedan palabras, así que copiaré las del doctor Morandeira que copiaba hoy en su blog Fernando J. Pérez:

"Anoche, ni el súper jefe Jong con todo su poderío económico, su impresionante despliegue económico y humano, y su manifiesta buena voluntad al frente de su gabinete de crisis al completo, pudieron ayudarnos. La bajada del Annapurna se convirtió al final en una retirada descontrolada en la que tras casi 24 horas de esfuerzos interrumpidos a mas de 7.000 metros de altura, cada uno de los participantes no podía hacer mucho más que pelear hasta la extenuación por su propia vida. Uno es ya perro muy viejo y cuando vi que la llegada a la cima se desarrollo entre las 15 y las 16 horas habiendo salido del Campo IV a las 2:00h de ese mismo día, la preocupación empezó a dominarme, muy por encima del sentimiento de alegría que nos producía el ver como TODOS alcanzaban la cima. Demasiado tarde, demasiado lento, demasiado esfuerzo, en una montaña temible en la que los descensos suelen convertirse en épicos. Una montaña que nunca me ha gustado, ni me gusta técnicamente hablando. Un montaño inmenso que obliga a largos rodeos desplazamientos y recorridos. Una montaña que se cae a trazos en medio de un maremagnun de seracs, caídas de rocas y avalanchas sin cuento. Una montaña en la que uno no depende de si mismo, si no de los desatados elementos.
Ayer, la tarde noche fue terrible, mientras poco a poco, los ascensionistas iban llegando destrozados al Campo IV en historias personales de supervivencia increíbles: los Coreanos como Miss Oh, al borde de la extenuación,; los dos rusos con ayuda y edematosos; los demás tocados en mayor o menor grado, menos jorge Egocheaga y martín ramos que parecen de otra galaxia y bajaran hasta el Campo II ayudando a un sherpa con edema cerebral; los nuestros, destrozados. Juanito, Carlos y el sherpa Dawa llegaban a las 24h al límite de sus fuerzas con congelaciones y alteraciones en la visión. Tolo y el sherpa Sonan, los mas jóvenes, no lograban llegar y se vieron forzados a un vivac a 7. 300 metros. Nadie en el campo IV parece estar con fuerzas para ayudarles. Desde el campo Base estamos organizando la operación de rescate y si no salen por sus medios los sacaremos. Quemando todo el enhebro que hay en este monte para ganarnos el favor de los dioses desde luego. Pero los vamos a sacar, a Tolo, su sherpa y a todos los del campo IV. En eso estamos."


Mañana volveré a ir a correr. Volveré a acordarme de Tolo Calafat, del sherpa que lo buscó durante once horas por un territorio que ni la nieve fresca conseguía iluminar. Volveré a acordarme de Iñaki y de la cima puntiaguda que parece apuntar a una dirección que nadie quiere seguir. No tiene nada que ver con la extraña melancolía que me acompaña estos días, pero intentaré compartir con ellos, desde lejos, inúltimente, el dolor de una tragedia tan épica, tan humana, tan real que muchos siguen sin entenderlo.
Descanse en paz Tolo Calafat.

lunes, 26 de abril de 2010

Sundiata Gaines


El rookie del triple mágico se ha llevado un premio a final de temporada: la mejor jugada del año. Las diez mejores de esta temporada me han parecido un poco flojas. No porque no tengan mérito, si no porque no estoy muy de acuerdo con la selección de la liga profesional americana. Tienen unos criterios que no acabo de comprender del todo, pero no voy a perder el tiempo tratando de explicarme. El caso es que el premio a la mejor jugada se lo ha llevado el triple en el último segundo de Sundiata Gaines.
Y lo que hace a la jugada más meritoria de lo que pueda parecer a quien la vea sin conocer el contexto, es que Sundiata Gaines consiguió con ese triple, no solo la victoria, si no también acabar con un partido casi perfecto de su rival Lebron James, y, de paso, ¡conseguir su primer triple en la NBA!
A él no le tenía que llegar el balón. Deron Williams, estrella del equipo, se había lesionado, y los Jazz habían ofrecido un contrato de diez días a un desconocido base de New York que llevaba catorce partidos, con muy buenos números, jugando para los Idaho Stampede de la NBDL. Antes había viajado hasta Italia, a Cantú, cuando terminó con sus años de baloncesto universitario en la Universidad de Georgia. Había jugado ya cinco partidos. Aquel era el quinto, en realidad. Los Cavs visitaban Salt Lake City y el EnergySolutions Arena presentaba un lleno casi absoluto. Lebron James estaba inspirado, había logrado 12 puntos consecutivos en los últimos minutos para intentar llevarse un partido apretado y disputado como siempre ocurre cuando un equipo de Jerry Sloan está de por medio. La última posesión era para los Jazz. Ronnie Price votaba, buscaba, pero no encontraba a nadie así que se la dio al único que vio cerca. A un Gaines que no sabía muy bien dónde colocarse. Demasiado alejado de la línea, ni tan siquiera Anthony Parker, su defensor, creía que el balón le iba a llegar a él. Pero le llegó. Y lanzó. Con los dos pies juntos, saltando con determinación, Gaines anotó el primer triple de su carrera al primer intento en el último segundo en su quinto partido.
Pero tengo más, sí, claro, tengo más. ¿Quieres hacerlo una novela? ¿Quieres que la historia funcione? Sundiata Gaines tiene dos heridas en el cuello. Son la entrada y la salida de la bala que le rozó el cuello cuando esperaba a su hermano a la salida de una tienda de fotocopias en New York. Un hombre salía con un maletín que se le cayó, se abrió y con el golpe se disparó la pistola. Gaines salvó la vida por unos centímetros.
Ya lo tienes todo.
Sundiata Gaines (que supongo que no tiene nada que ver con el baloncestista-peso pesado Charles Gaines) consiguió renovar su contrato por los Jazz. Esta temporada ha jugado 32 partidos (más dos que lleva ya de play off) con medias muy humildes de 13 minutos y 3 puntos por partido. Pero está contento. Sam Ytuarte, periodista deportivo que coincidió en las canchas cuando eran niños, dice que siempre se supo que tenía la personalidad y el talento para llegar a triunfar. En Georgia conseguía 12 puntos por partido, en la NBDL se fue hasta los 23 de media en 14 partidos gracias a que al entrenador MacKinnon le gusta un tipo de baloncesto que va más con las características de Sundiata Kofi Gaines, aquello que los americanos llaman uptempo, correr, abrir el campo, anotar. Ahora, se ha reconvertido en un jugador de equipo, de banquillo, siempre dispuesto a aportar cuando se lo pidan. Y parece que no se le da mal. Aún tiene 24 años, pero ya ha conseguido su primer éxito, y con un triple simplemente ya le ha valido. Veámoslo:

Dusan Kecman


Ni que fuera la mañana de reyes. El amigo de las zapatillas asics, después de su deportivo fin de semana, me despierta esta mañana con un regalo en forma de mensaje electrónico. En una temporada de finales agónicos, con muchas canastas sobre la bocina, a cada cual más polémica, el triple salto mortal se ha dado en la final de la liga Adriática.
El escenario, mejor imposible. La Cibona de Zagreb de Velimir Perasovic recibía en su estadio a un Partizan de Belgrado que va camino de su temporada más histórica. A falta de unos pocos segundos, parecía que tenían la victoria asegurada. Pero a partir de ahí, todo se precipita con una secuencia de jugadas memorables: el mal pulso de Lawrence Roberts en los tiros libres, el primer triple de Marko Tomas, el segundo de Bojan Bogdanovic que hace explotar al pabellón y el tercero, inverosimil, del veterano ex jugador del Panathinaikos, Makedonikos, Efes Pilsen, Oostende y Kiyv, Dusan Kecman que, desde su cancha, y con menos de un segundo para el final del partido, cuando los de Perasovic ya lo celebraban, consigue una canasta que quedará en la memoria. Una demostración más de lo que queda del deporte cuando pelas la naranja hasta el final.
Gracias al de las asics y a disfrutar aunque no entendamos nada de lo que dicen los comentaristas. Las caras de Tomas, Bogdanovic y Perasovic son para enmarcar. Hay un video mejor en el que dan en directo los últimos minutos, pero para eso tenéis que pinchar en el enlace final (o más bien copiarlo en vuestra barra de direcciones porque no he tenido tiempo de hacer el enlace), el video que cuelgo primero es un resumen con el partido ya terminado y el pabellón vacío. También pego el enlace a la noticia en acb.com que me facilitaba en su mensaje el maratoniano.

http://www.acb.com/redaccion.php?id=66818
http://www.kosarka.hr/main.asp?dir=videocenter&vid=904

sábado, 24 de abril de 2010

Pablo Orbaiz


Creo que lo que más me ha sorprendido no es que se arrepienta, si no cómo se ha arrepentido. Sus palabras desprenden una lucidez que, y me duele decirlo, generalmente no se escucha a los jugadores de fútbol. Quizás sea un prejuicio por mi parte o una idea preconcebida injusta porque en un colectivo con tanta gente es de suponer que habrá jugadores que sean inteligentes. Y con inteligentes, que quizás no es la palabra más adecuada, no me refiero a que lean libros o vean películas en blanco y negro, si no a que tengan la suficiente bravura como para analizar sus actos con frialdad y expresar sus pensamientos con palabras cabales. Por eso, creo que merece la pena resaltar, lo voy a poner hasta en negrita, lo que declaraba Pablo Orbaiz en una entrevista publicada en El Correo a tenor de su autoexpulsión por agresión a David Cortés durante el partido contra el Getafe.
"No hay mayor dolor que el de la conciencia. No tenerla tranquila es lo peor que puedes tener. Sabía que lo había hecho mal y lo primero que hice fue pedir perdón a mis compañeros y al entrenador. Era muy consciente del daño que causé al equipo."

jueves, 22 de abril de 2010

Awvee Storey


Ahora que Martynas Andriuskevicius parece recuperar su carrera deportiva, me he preguntado qué fue de Awvee Storey. Para aquellos que no lo sepan o no se acuerde, Storey fue el triste protagonista del puñetazo que noqueó a Andriuskevicius durante un entrenamiento del equipo de la NBDL que ambos compartían. Peor que el puñetazo fue la caída e incluso se temió por la vida de Andriuskevicius, quien tuvo que trabajar duro para recuperar el habla y para vencer los vaticinios de algunos médicos que decían que nunca más jugaría al baloncesto. Storey, ya tenía ancedentes, después de resistirse a la policía cuando celebraba el Memorial Day con su amigo Gilbert Arenas. De ambos sucesos salió limpio, en el caso del puñetazo, porque Martynas Andriuskevicius rechazó presentar cargos.
Aquel puñetazo tuvo mucha atención en la prensa norteamericana. Recordó a aquel famoso de Kermit Washington en 1977, cuando jugando con Los Ángeles Lakers le soltó a Rudy Tomjanovich, de los Houston Rockets, uno de los puñetazos más certeros de la historia del baloncesto (cuelgo el vídeo).
Storey se ha convertido en el prototipo de jugador profesional americano trotamundos. Además de breves pasos por equipos NBA como los Nets, los Wizards y los Bucks, su última ocasión, Storey ha jugado ya en Venezuela, Alemania, Corea del Sur y Nueva Zelanda. Hace poco acaba de volver a la prensa al firmar por el equipo más famoso de la liga filipina, el Barangay Ginebra Kings con los que aspira a vencer en la PBA Fiesta Conference.
Sobre lo que pasó con Andriuskevicius nunca le he oído hablar. Dicen que después de aquel suceso, su único comentario fue: "Marty is a cool guy" que viene a ser algo así como "Marty es un tío majo."
De postre os dejo un video de youtube con los momentos más desagradables del deporte americano según un programa deportivo, es todo béisbol, baloncesto, hockey y fútbol americano, a excepción del mordisco de Tyson, y se ve al propio Kermit Washington y algunas imagenes realmente repugnantes. A disfrutar con el morbo.

Cadel Evans


Una vez más, toca parar. Que quiere decir que toca correr. Tres salidas de unos once kilómetros tres días seguidos. Una de ellas al ritmo de una liebre que baja el suyo pero sube el mío. Hoy toca la cuarta. El viernes quizás descanse. El sábado me veo en la Milla de Lutxana si la gente sigue animándose. Toca correr cuando toca parar. Al paro. Otra vez con el certificado de empresa a la oficina del INEM. Y ya van tres veces en un año. Y eso que trabajo no me ha faltado en todo este tiempo. Todos los días, a las siete de la mañana, al escritorio. Cada trabajo tiene sus penalidades. A mí me tocó sufrir de la espalda, de la vista y de que alguna gente no entienda lo que hago. Por eso ayer al ver a Cadel Evans me permití pensar en mi mismo. Nunca hay que dejar de pedalear cuesta arriba. Siempre puedes coger a Antón, a Contador, siempre puedes ganar en Huy. Evans es un año más joven que yo y ya sabe muy bien lo que es quedarse a un paso de la gloria. Cuando se retire, sin embargo, se le recordará como el mejor corredor australiano de la historia, campeón del Mundo, pódium en el Tour y en la Vuelta, ganador en Huy. Yo sigo subiendo. Sigo apretando los dientes. Supongo que algún día, llegaré a la meta el primero, aunque sea el segundo, pero satisfecho de haberla alcanzado. Mientras tanto, toca parar. Que quiere decir que toca correr.

martes, 20 de abril de 2010

Goran Ivanisevic


Fue todo un personaje de las pistas de tenis que redujo su momento de gloria a un solo torneo, el de Wimbledon de 2001 cuando ganó en la final al australiano Patrick Rafter después de esperar hasta que el torneo le diera una invitación para poder participar. Antes ya había perdido tres finales, ante Andre Agassi y Pete Sampras, el número uno de su época y un auténtico quebradero para Ivanisevic que ha confesado que Sampras le volvía loco.

Protagonista de muchas anécdotas, capaz de lo mejor y lo peor sobre la pista, Ivanisevic sacaba bien y poco más, según dicen que dijo McEnroe aunque luego el propio McEnroe lo negó ante Ivanisevic. Hoy le entrevistaban en un periódico deportivo nacional, no recuerdo cuál, pero si tenéis oportunidad de leerla merece la pena. Sin pelos en la lengua, Ivanisevic es sincero con su carrera deportiva y con sus opiniones ante temas tan diversos como Rafa Nadal o el FC Barcelona. Incluso no tiene reparos en decir que su compatriota Ljubicic es mejor que Cilic, el jugador al que ahora él entrena.

Desde que se retiró, Ivanisevic se ha convertido en un formal padre de familia, aunque tuvo tiempo para participar en un reality show de su país donde cambiaba su vida por unos días con la de un barrendero. Según explica en la entrevista, Ivanisevic siempre quiso ser barrendero cuando era un niño, quién sabe por qué, igual por lo mismo por lo que, según dicen, tenía un gran saque gracias a los días que dedicó de pequeño a tirarle piedras a los gatos. Lo dicho, la entrevista merece la pena, pero no me acuerdo de dónde lo he leído.

lunes, 19 de abril de 2010

Francisco Mancebo


La Operación Puerto pasará a la historia del ciclismo como un agujero negro. Se tragó a un gran número de corredores atrapándolos en otras galaxias paralelas donde, al parecer, también se monta en bicicleta. El jeroglífico de nombres claves se convirtió en un pictionary que a algunos ciclistas les llevó al paro, a otros a la jubilación, a muchos a seguir corriendo estigmatizados y a unos pocos los obligó a exiliarse.


Estos días se corre la Ruta a México Telmex 2010 y ahí se encuentran algunos de esos corredores que han seguido una carrera exótica desde que sus nombres se relacionaron con el proceso contra el doctor Eufemiano Fuentes. Óscar Sevilla y Francisco Mancebo son los nombres más rutilantes. Ambos formaron parte de una generación de ciclistas españoles que prometían días de gloria. Mancebo, con su particular forma de pedalear sobre la bicicleta, se convirtió en un corredor que hacía de su sufrimiento un talento sobrecogedor. No fueron pocos sus éxitos, ya que en los primeros años del siglo XXI, desde su estreno en la Clásica de los Puertos, se forjó un palmarés bastante digno para alguien que basaba su ciclismo en la resistencia. Se hizo con la Vuelta a Burgos, la Vuelta a Castilla y León, la Clásica de los Alpes, el Campeonato de España, una etapa en la Vuelta a Alemania y una etapa en la Vuelta a España donde además pisó el podium. También hizo entre los diez primeros del Tour en tres años distintos. Después llegó la operación Puerto que no le supuso sanción ninguna pero se le vetó en las grandes pruebas, obligándole primero a emigrar a Portugal y después al Rock and Racing, un proyecto ciclista norteamericano que aspiraba a crear un buen equipo con el propio Mancebo, Tyler Hamilton, Óscar Sevilla o José Enrique Gutiérrez pero al final no ha conseguido ni un puesto en el grupo de los equipos continentales.


Desde entonces, Mancebo ha seguido cosechando éxitos en un circuito americano muy lejano para la prensa y los flashes europeos. Sus victorias en la Vuelta al Chihuahua, en el Tour de California, donde ganó una etapa, o los buenos resultados en la Clásica RCN que ganó Óscar Sevilla, convirtiéndose en el primero corredor no colombiano en hacerlo (esta prueba, que ya no cuenta con puntuación UCI, la han ganado, entre otros, Álvaro Mejía, Lucho Herrera, Julio César Aguirre, Fabio Parra, Israel Ochoa, José Joaquín Castelblanco,Libardo Niño, Raúl Montaña o Alberto Camargo), se ampliaron con la victoria en la Vuelta a Asturias.

Ayer hizo segundo en una etapa de la Ruta a México que picaba hacia arriba en los últimos 35 kilómetros y se hizo con el liderato. En la prensa mejicana, anunciaban así su nuevo liderato:

"Francisco Mancebo, ese fuerte corredor español que tiene fama de figura en nuestro país y quien realmente es un ciclista de cualidades excepcionales, se colocó como nuevo líder de la Ruta México Telmex 2010, corrida apenas su segunda etapa, corta pero muy dura debido a su terreno casi siempre en ascenso en los últimos 35 kilómetros y un remate fuera de lo normal en la línea de meta ubicada en pleno centro de esta capital, frente al Palacio de Gobierno."

Tiene 33 años y es un producto de la veterana y productiva cantera de la Fundación Provincial Deportiva Víctor Sastre de El Barraco (Ávila). Sin entrar a juzgar su involucración en la red de dopaje de Fuentes porque no conozco los datos al detalle, Mancebo sigue demostrando que en esas galaxias paralelas también le dan a los pedales y que todo aquello que no cubre la UCI también es territorio de ciclismo. Quizás otro día, hago lo mismo con Sevilla, ya veremos.

domingo, 18 de abril de 2010

Zersenay Tadese


Hace menos de un mes el eritreo, cuatro veces campeón del mundo de media maratón, rebajó el récord del mundo de la distancia en Lisboa. Se acabó mi experiencia en Lisboa después de un viaje de regreso que a Tadese le habría cansado más que la carrera de Lisboa. En una semana he viajado en los metros de Londres, Madrid, Bilbao y Lisboa. Y es que ayer me hice tres de golpe. A las tres de la tarde en el aeropuerto de Lisboa no había problema con nuestro vuelo. A las cuatro el cartel anunciaba más información a partir de las cinco. A las cinco lo cancelaron. En un minuto nos dieron una única solución: os montáis en el de Madrid y cuando lleguéis allí os buscáis la vida. Y tuvimos que hacerlo. De Barajas a Avenida a América y después a esperar hasta que a la una y media de la madrugada saliera el autobús con destino a Bilbao repleto de gente con problemas con sus vuelos. Antes de las siete de la mañana llegué a casa, con la sensación de haber batido mi mejor marca en una media maratón que nunca he corrido. Y de por medias, un mensaje de texto con la notica de que Chubb jodía el sueño bilbaíno y un bocadillo de tortilla mientras veía como los comentaristas de Telemadrid maldecían la inoperancia atlética en defensa. Y ahora me acuerdo de que hace solo unas horas viajaba en la línea de Santa Apolonia, altura de Restauradores, cuando vi que anunciaba una carrera en el metro de Lisboa para este domingo, quince kilómetros por las vías del subterráneo. El póster era chulo, con unas zapatillas que llevaban de diseño las cuatro líneas coloridas del metro lisboeta. ¿Y andaandará Tadese? Pues no sé, pero yo acabo de levantarme hace un rato y no puedo quejarme, ya que, al menos, yo pude regresar a casa evitando la puta nube de polvo. Seguro que a muchos de los que están tirados en los aeropuertos no les importará viajar en el autobús supra-supra chuli del Barça hasta Milán. Por cierto, un recuerdo para Jean el francés de Marsella y sus tres compañeros que no encontraron mejor solución que compartir un taxi desde Lisboa hasta la frontera con Francia. Otra maratón singular.

jueves, 15 de abril de 2010

José Alvalade


El Vizconde de Alvalade fue uno de los fundadores del Sporting Clube de Lisboa, y ahora le da nombre al estadio. Estoy en Lisboa. En el avión vine leyendo una revista de la aerolínea TAP. Leí un reportaje sobre la cantera del Sporting. Estaban orgullosos. Decían que eran la mejor cantera de europa junto con la del Barcelona y la del Olympique de Lyon. Para ello esgrimían nombres: Moutinho, Futre, Simao Sabrosa, Nani y sobre todo estaban orgullosos, decían, de ser la única cantera de europa con dos jugadores ganadores del premio FIFA al mejor jugador, Luis Figo y Cristiano Ronaldo. Creo que ayer perdieron el derby con el Benfica. Llevo un día aquí, pero me da la sensación de que la ciudad en general tira más para este segundo equipo. ¿Me equivoco? Puede. Hoy hemos acabado tomando cerveza en una pastelería llamada Libertade. Éramos un alavés de corazón rojiblanco, un rojiblanco de corazón barakaldés, un gallego de origen leonés al que parecía importarle poco el fútbol, un alemán que echaba a Jupp Heynckes la culpa de cargarse a su equipo del alma, el Eintracht de Frankfurt, y una italiana de Bolonia que además de hablar con añoranza del equipo de su ciudad cuando estaba liderado por jugadores como Mancini, Roberto Baggio o Signori, ha reconocido que era aficionada de la Virtus de Bolonia, que Danilovic era la ostia y que se alegra de todo lo malo que le pase al otro equipo de la ciudad, el Fortitudo. Después hemos vuelto al restaurante italiano cercano a Marques de Pombal, pero con el segundo gol de David Silva nos hemos ido. Y ahora me aburro en la habitación y no tengo sueño y se ha acabado el programa de Oprah Winfrey (ayer me tragué el de Ellen DeGeneres). Lisboa, fuera, parece que duerme. En el blog amigo de pormaratones, he visto, habla la gente de correr por el monte. Hay una nube de polvo cubriendo el norte de europa y tengo dos manzanas en la habitación de este hotel, una en cada una de las mesillas. Me dan ganas de darles patadas. Me dan ganas de irme al monte a correr. Me pregunto si llegará aquí la nube de polvo. Antes de ayer hubo un tornado. ¿Será la cantera del Sporting de Lisboa la mejor del mundo? ¿Conciliaré el sueño? Voy a cambiar de canal, a ver bailes de salón en eurosport.
Boa noite

martes, 13 de abril de 2010

Malcolm Elliott


Y luego hablan de Lance Armstrong. Los que son un poco más mayores que yo, y los de mi generación, igual aún recuerdan al británico con el maillot del Teka. O del Seur. O incluso antes del Fagor. Y es que el antiguamente esprinter inglés nació hace 49 años (bueno, 48, aún no ha cumplido los 49) y se retiró allá por 1997 después de haber sido corredor profesional desde 1984, año en el que debutó con el equipo Raleigh-Weinmann. Pero no tuvo suficiente, porque en 2003 volvió al profesionalismo en el equipo Comptel-Colorado Cyclist y desde entonces hasta ahora, cuando sigue disputando carreras profesionales en las Islas Británicas con el equipo Motorpoint-Marshalls Pasta que está encuadrado dentro de la categoría Continental de la UCI.
En su primera época, Elliott fue un reconocido hombre rápido que ganó la vuelta de su país, etapas en Vuelta a España, Vuelta a Aragón, Semana Catalana, Trofeo Castilla y León, Vuelta a Galicia, Vuelta a Cantabria, Volta a Catalunya, Vuelta al País Vasco o Tour Dupont. También ganó el maillot de la regularidad en la Vuelta a España. Un buen palmarés que ha ampliado desde que volvió en 2003 con algunas carreras menores de Gran Bretaña como la Shay Elliott Memorial Race, la East Midlands International Cicle Classic o el GP Havant.
El año pasado, Brenda Gallagher le dedicaba un espacio en el Telegraph ante la que era una nueva participación de Elliott en la Vuelta a Gran Bretaña. En la entrevista, explicaba que se aburría después de su retirada y que como nunca tuvo lesiones decidió volver. Contaba que ésta era como una segunda carrera para él y que aún tenía algún día bueno. Aprovechando, también hablaba de Mark Cavendish y el tren de la Columbia, que, lejanamente, comparaba con el de Jean Paul Van Poppel y su Superconfex.
Por cierto, ya que estamos con ciclismo, no tengo palabras para Fabian Cancellara. Como decía Alan Pérez en el twitter del Euskaltel-Euskadi: "creía que la motogp era en Qatar"

domingo, 11 de abril de 2010

Aitor Larrazabal


Aunque el Lemoa va a tener muy muy difícil meterse en el play off de ascenso, no ha sido nada mala la primera temporada de Aitor Larrazabal como entrenador de Segunda B. Tras empezar con el Gatika en la División de Honor, Larrazabal aceptó el reto que le propuso Ordeñana, que tiene muy buen ojo para este tipo de apuestas, y tiene al equipo bien colocado en la clasificación tras una temporada llena de remontadas, expulsiones, finales agónicos y siempre rozando el play off. Algunos lo mientan como futurible para el Athletic cuando las conversaciones de zuritos se encienden demasiado y todo el mundo se afana en buscar el Guardiola autóctono.
Pero no quería hablar de Aitor Larrazabal como entrenador, si no como de aquel lateral zurdo que se sacaba del interior del pantalón un chupete para celebrar los goles, tantos goles que metió de penalty. Porque mira que la temporada desde el punto fatídico está siendo fatídica para el Athletic. Un penalty más fallado y ya no sé cómo van las cuentas pero son seguro casi tantos los errados como los acertados. Cuando les pitan penaltis a favor, los aficionados, más que celebrarlo, cruzan los dedos y miran para otro lado. Hoy en el Quiroga no ha hecho falta. Primero, porque ya habían metido otros dos goles antes y se veía todo con más calma, y segundo porque J ya lo ha dicho, y ha dicho que siempre acierta, "lo falla" y lo ha fallado, así que A, te toca irte a vivir a Lisboa. Pero, vamos, chorradas aparte, que se echa de menos a Larrazabal, y a Garitano, que también fallaron sus penas máximas, pero se echa de menos la eficacia global.
Ahora, eso sí, y aquí viene el detalle que me ha llevado a hablar sobre los once metros, leyendo (y no me preguntes porque estaba leyendo esto porque te voy a dar pena), la crónica del Cartagena-Murcia de esta jornada, leo a raiz del penalty que Natalio falló esta mañana para el Murcia:
"Al Murcia le han señalado seis penaltis a favor en esta Liga y los ha fallado todos, incluido el que se ordenó repetir en Villarreal y que Óscar Sánchez falló por dos veces." (Agencia Efe)
Casi nada. Para luego quejarnos nosotros.

Tony McCoy


Hoy me había puesto el despertador pero me he olvidado de un pequeño detalle: aún no le había cambiado la hora al reloj, así que me he levantado una hora más tarde. Cuatro días almorzando en el Pret A Manger me han dejado un poco desnortado. He seguido la Vuelta al País Vasco por internet y poco más. El resto ha sido ser un turista más paseando por Regent Street. Pocas cosas deportivas que contar. Vimos a los habituales disfrutar con los goles del Manchester United hasta que dejaron de hacerlo y gritaron como locos en aquel pub del Soho cuando metió gol Fernando Torres. Por cierto, que le vimos en el metro si no fuera porque no era él, pero cómo se parecía el chico de los tatuajes y la música hardcoreta. A los que sí nos encontramos, con gafas de espejo y bien repeinados, fue a los juveniles del Parma paseando por Piccadilly. Y cerca del Ritz compré The Times en un quiosco para enterarme de los cuatro goles de Messi al Arsenal. La prensa inglesa se deshacía en elogios hacia el pequeño delantero argentino, se ve que ellos no habían desgastado aún esos adjetivos. El último día, mientras desayunábamos, nos despertamos con la noticia del avión del presidente polaco y poco después pasaron a anunciar el tiempo, con una sección especial para analizar cómo iba a hacer durante el Gran National. Todo un acontecimiento para ellos y por ello, las portadas de los periódicos hoy se abren con fotos del jinete Tony McCoy cabalgando sobre "Don't Push It" para llevarse la victoria en Aintree. También se preocupaban por el Master de Augusta. ¡Me enteré de lo de Clemente, eso sí! Y anoche me dio tiempo a ver como de nuevo Messi y Xavi y los demás daban un golpe de efecto a la liga. Hoy volveré a la rutina del partido dominical de las cinco pero aún con el cambio de hora en el estómago, ansioso por encontrar un Pret A Manger donde poder comprar un sandwich de beicon frío y un zumo de naranja recién exprimido. No sé por dónde transcurrirá la Maratón de Londres, de la que los ingleses están muy orgullosos, por cierto, con foto y referencia y todo en lo alto del Tower Bridge, pero yo me la he hecho en cuatro días a pata. Ahora, habrá que volver a correr para librarse de los donuts, las muffins y las mousses. Es lo que tiene, cada vez cuesta más, nos hacemos mayores, aunque, como Christopher Horner, y como el vino, no hay que perder la ilusión.

martes, 6 de abril de 2010

Stijn Devolder


El pelotón esconde muchas curiosidades y no podía ser de otra manera. Ciclista de todas las partes del mundo, con muchas culturas distintas, caracteres muy dispares y relaciones que van desde la amistad hasta la enemistad más personal. Ayer Freire y Valverde pusieron en juego su amistad, aunque esto probablemente sea decir mucho por mi parte. Iban Velasco acató órdenes que duelen pero hay que hacerlo, como lo hacía Andrea Tafi y como no lo hacía, al parecer, Stijn Devolder. Fabian Cancellara dejó una nueva página para la historia, con una reluciente demostración de fuerza y talento en los laberintos flamencos. Antes de empezar la prueba, hubo cierta polémica y expectación con la actuación de Devolder. El belga, según dicen, es de los que reduce su temporada a un puñado de pruebas: abriel es su mes, después, parece que pasa del resto. Hasta corredores ajenos a la disciplina de su equipo le criticaron. Ganó en Flandes dos veces quitándose el pinganillo y pasando de la táctica del equipo. Tom Boonen callaba y Patrick Lefevre, su director, lo dijo bien claro, si volvía a ganar, no pasaría nada, pero si no lo hacía, tendría problemas. No ganó, pero según él mismo dice acató las órdenes y trabajó para Boonen que hizo segundo. Lefevre aún no ha dicho nada, pero no deja de ser curioso, un ejemplo más de la obsesión que producen algunas pruebas.

Ayer en Putxeta se vio ciclismo del bueno, del que obliga a apretar los dientes a los ciclistas. Se vio que a los jóvenes corredores que ya hemos destacado aquí, más otros de los que aún no hablamos como Kreder, se unen nuevos como Intxausti o Jean Christophe Peraud, que de joven no tiene mucho, pero no se le había visto por ahora con su forma de correr que recuerda a un famoso corredor de Texas. Samuel Sánchez se quebró. Valverde demostró su fuerza. Los Schleck al acecho y el pelotón que parece anunciar una disputada Vuelta al País Vasco. Solo Ricky ha votado en la encuesta que propuse, pero bueno, hay tiempo hasta el sábado. Yo voy a votar hoy, y como me la trae floja, lo haré con el corazón, que nunca suele ser muy buen criterio para estas cosas, pero bueno. Ya veremos si en Usartza los protagonistas son los mismos.

Qué bueno que nunca dejará de haber cuestas empinadas. Por cierto, Riccó ganó ayer en la Settimana Lombarda. ¿Qué pensamos ahora?

lunes, 5 de abril de 2010

Da'Sean Butler


Mientras yo asistía a la mayor paliza esta temporada en la ACB, Mike Krzyzewski preparaba la final en Indianapolis. Son 14 años de manera consecutiva jugando por el título de la NCAA. Y, con el de ayer, sí, ganaron los Blue Devils, Coach K ha conseguido su cuarto título nacional. El que fuera discípulo de Bobby Knight y ex seleccionador nacional tiene el mayor registro de victorias de la historia del baloncesto universitario dentro de la fase final por el campeonato de la NCAA.
Gordan Hayward lo tuvo en sus manos. Lanzó desde la media cancha, pero el balón golpeó en el aro. Era, claro, el triple de Jimmy Chitwood y por unos segundos, escribirá el cronista, toda Indiana aguantó la respiración, pero no entró y Butler se quedó rozando el sueño con sus dedos. Kyle Singler, Nolan Smith y Jon Scheyer, más el pivot fajador Brian Zoubek y el quinto en discordia en el quintento, Lance Thomas metieron todos los puntos de su equipo, 61 en total, dos más que la universidad de Indiana que sobrevivió gracias a Hayward, Howard y Mack y a un sorprendente Avery Jukes desde el banquillo.
En fin, resumiendo, y lo dejo, que tengo mucho que hacer: se acabó el baloncesto universitario de 2010 y Coach K volvió a lucir en lo más alto. Sinceramente, no creo ni que Singler, ni Nolan Smith, ni Scheyer lleguen a ser grandísimas estrellas de la NBA (ojalá me equivoque por el bien de sus bolsillos, pero, de todas formas, creo que todos pueden ser buenos jugadores, especialmente Kyle Singler) pero el entrenador que rechazó ofertas multimillonarias de Celtics, Blazers o Lakers sabe hacer de todos ellos un conjunto macizo que mejora las prestaciones de cada elemento individual. Su contrincante, Brad Stevens, de 33 años, artífice del éxito de Butler aún es joven para esperar una nueva oportunidad, aunque me temo que costará mucho volver a ver a Butler tan arriba en el bracket. Hayward y Mack estarán contentos cuando pase el tiempo, y probablemente hagan carrera. La película, por otra parte, quedará aún más realista con la derrota final. Y no puedo terminar todo este peñazo de crónicas sin animar, ya que lo hice con Prestes y Bogut, a Da'Sean Butler, el tirador de West Virginia que tan buena temporada había hecho y apuntaba alto en los mock draft, quien se lesionó de mucha gravedad en la semifinal ante Duke.
Y la próxima temporada: Go Creighton Go!

Francis Pellisier


Me la voy a perder otra vez, joder. Hoy empieza la Vuelta al País Vasco, y, ¿sabéis lo que voy a hacer? Una porra, una porra sin premio ni nada, pero a ver si la gente vota y acertamos el ganador final. Yo voy a elegir los candidatos, así que si no lo acertamos porque el ganador ni aparecía entre los posibles elegidos, la culpa será mía.
El martes, es decir, mañana, me voy de viaje, así que puede que por unos días abandone el blog, pero no me podía ir sin hacer una entrada sobre la Vuelta al País Vasco - Euskal Herriko Itzulia que hoy comienza en Zierbana con un pelotón competitivo, muchas ilusiones y encerronas de sobra para volver a ver un gran espectáculo.
Desde que Pellisier ganara la primera edición allí por 1924, el palmarés de la prueba por etapas y por excelencia en el mes de abril, reune a un puñado de ganadores que resumen a la perfección la historia del ciclismo: Bartali, Anquetil, González Linares, Ocaña, Laguía, Kelly, Breukink, Roche, Chiapucci, Rominger, Zulle, Casagrande, Jalabert, Kloden, Rumsas, Mechov, Di Luca, Gómez Marchante, Cobo y Contador, el último, y que no estará este año. Entre todos estos, unos pocos autóctonos que disfrutaron de la victoria final: Lasa, Cabestany, Gorospe, Iñigo Cuesta, Aitor Osa e Iban Mayo. Corredores completos, todoterreno, rápidos y protagonistas de los meses de lluvia y barro.
Este año, Zierbana dará la salida con puertos que sorprenderán a más de uno. Cobarón, La Reineta y Las Calizas pondrán nombre a un recorrido sinuoso, húmedo y peligroso. Dicen que se decidirá en Orio, pero antes de llegar ahí, habrá oportunidades de reventar la carrera. Es lo más bonito de estas pruebas, que se pueden ganar en cualquier revuelta, en cualquier cuesta que no aparece en el perfil de la etapa.
Con la ausencia de Contador, la presencia de Valverde y la ambición del equipo de casa, la vuelta se presenta con un buen puñado de corredores que harán la carrera más dura aún. Euskaltel arropará a Samuel Sánchez con corredores de brega y una segunda opción, Intxausti, que no ha empezado mal la temporada. Necesitan una victoria como agua de mayo. El Caisse d'Epargne lo dirigirá Neil Stephens y propondrá a Valverde como candidato final a la victoria, pero el barakaldés David López y David Arroyo también podrán tener protagonismo. Astaná no trae a Contador, pero sí a Tiralongo, de la Fuente y Dani Navarro. Freire viene con Rabobank y acompañado por Garate, Gesink y ten Dam. Columbia siempre tiene candidatos a ganar, en esta ocasión, Rogers, Albasini, Monfort, Pinotti o Velits. Liquigas lo intentará con Zaugg y Vandborg. Katusha trae a Purito Rodríguez en forma además de a Botcharov y Kolobnev. Cunego liderará a Lampre. El Sky de Sean Yates trae un equipo fuerte con Wiggins, Gerrans, Carlstrom o Calzati. Quick Step con el joven Malacarne, Pineau o Seeldrayers. El Milram de Gerdemann, Frohlinger y Fothen, Markus no Thomas. El Saxo Bank estará encabezado por los Schleck pero ¿quién puede olvidarse de Voigt? Omega Pharma a los veteranos, Van den Broeck, Aerts, Brandt o Wegelius. Garmin, con Bingen Fernández de director, luchará con Kessiakoff, Hesjedal o Zabriskie. Matxin y su Footon Servetto buscarán el protagonismo con Capecchi y los vecinos Aitor Pérez Arrieta e Iban Mayoz. Los francés de Madiot tendrán Casar, Le Mevel, Di Gregorio y Meersman. Radioshack viene sin Armstrong pero con Kloden, Zubeldia, Paulinho y Horner. Ag2r con el incombustible José Luis Arrieta, más Alex Efimkin y unos jovenes desconocidos pero potenciales sorpresas. Y por último, Xacobeo vendrá fuerte pero comenzando con Mosquera, David García, Veloso o Rodrigo García, y Andalucía-Cajasur con Manuel Vázquez, Calvente y el antiguo vencedor de esta prueba José Ángel Gómez Marchante. No está nada mal. Y habrá más que no han salido aquí y si saldrán del pelotón para intentar ganar. ¿Quién lo hará? ¿Favoritos? Para eso la encuesta, la cuelgo y a votar. Esta tarde empieza el espectáculo. Ya se oirán piñones en Zierbana y desde mañana en Londres intentaré enterarme de quien termina ganando en Orio. Ahora, me toca pasar la aspiradora.

domingo, 4 de abril de 2010

Gordon Hayward


Ya tenemos la hazaña de cada generación. Hasta el MARCA se ha puesto las pilas y ha recuperado la historia de Jimmy Chitwood y Bobby Plump. Ahora es Butler el equipo que por ser de una universidad pequeña y del mismo estado y haber dado la campanada de llegar hasta la final de la NCAA se convierte en el objeto perfecto para crear una épica que por repetida hasta cansa. Pero a ellos todo esto se las trae floja. Porque lo han conseguido. Dejaron fuera a todos sus oponentes, incluyendo el último, la Michigan State de Tom Izzo que creyó en la victoria hasta el último segundo porque a los chicos de Butler les temblaron las muñecas en los últimos minutos. Pero ya están ahí, 52-50 y Gordon Hayward, con 19 puntos y 9 rebotes, bien secundado por el escolta Shelvin Mack llevan a Butler a la gran final para sorpresa de todos, supongo que del presidente también.
Ni Purdue ni Indiana, las dos grandes estrellas del estado de los Hoosiers, ha sido la pequeña Butler la que ha roto todos los pronósticos y hasta Tom Izzo se ha hecho un "bulldog": "If I was not playing, I'd be a Butler fan. I like they way they play, I like their story. They play like a Big Ten team." O lo que es lo mismo: "Si no jugara contra ellos, sería un fan de Butler. Me gusta como juegan y me gusta su historia. Juegan como uno de los diez grandes equipos."
Pero no lo van a tener nada fácil. Enfrente, el Mago K regresa a la palestra. Tras 8 años sin alcanzar la final, los Blue Devils se libraron de West Virginia con relativa facilidad y volverán a estar en el último y definitivo partido. 21 puntos de Kyle Singler, un alero blanco de 2'06 con buen rebote y pase, 19 del base Nolan Smith y 23 de Jon Scheyer, al que llaman el Jordan judío.
Me dice el corazón que la hazaña de Butler llegará a rozar con los dedos el final feliz. Veo a Duke llegando a la final con confianza, con mucha hambre, y con entrenador bregado en mil batallas. Mientras tanto, visto los últimos minutos de su partido de semifinales, a los bulldogs de Butler me parece que les temblarán las piernas. Pero quizás me esté pasando de listo. Todo el estado intentará reunirse en el Lucas Oil Stadium y ya sabemos que América es el país donde se cumplen los sueños... y luego se hacen de oro en Hollywood.
Por cierto, y para terminar ya con tanto baloncesto, dos palabras de ánimo, una para cada uno, para los dos trágicos protagonistas de la jornada, un brasileño en España y un australiano en Estados Unidos. Espeluznante tanto lo de Paulo Prestes como lo de Andrew Bogut que, además de puesto, compartían la gran temporada que a distinto nivel estaban haciendo los dos. Una verdadera lástima.
Y un último por cierto, porque me olvide de ellos como está mandado. Los chicos de Creighton hace tiempo que terminaron la temporada. Se quedaron en semifinales del CollegeInsider.com Postseason Tournament al perder en Springfield, Missouri contra Missouri State, que después vencería a Pacific en la final y se haría con el título. El mejor jugador de la temporada ha sido Kenny Lawson Jr y se avecina un nuevo cambio generacional en el equipo que no ha respondido bien a lo largo de la temporada y tiene a varios jugadores que, al estar en edad senior, dirán adiós a su época de jugadores universitarios. Ni Justin Carter, ni Cavel Witter, ni Chad Millard volverán a jugar en el Qwest Center.
Las estadísticas finales de nuestro amigo Casey Harriman, las siguientes:
16,5 minutos por partido, con medias de 3 puntos por partido y 2'6 rebotes. El único dato positivo fue que durante la mitad de sus partidos salió de titular. Ahora ya le queda un año, esperemos que el año que viene Dana Altman vuelva a contar con él. Será su último, igual que para el hermano pequeño de Korver, P'Allen Stinnett, Kenny Lawson Jr y otros dos jugadores irregulares pero que han tenido cierto protagonismo, Runnels y Ashford, eso me hace pensar que si alguno de los freshman crece, el año que viene puede ser una buena temporada con tanto senior en el equipo. Esperemos que sea así. Supongo que seguiré contándolo.

Luka Pavicevic


Y por último, los rivales del Bilbao Basket en semifinales, los albatrosses de Berlín dirigidos por uno de aquellos históricos protagonistas de lo que fuera la Jugoplastika, Luka Pavicevic.
El balcánico cuenta con una plantilla que dicen que hace un juego controlado y reposado, basado, en gran parte, en el talento del ex jugador del Real Madrid, Blagota Sekulic. Junto a él, hasta cinco americanos se reparten la pelota y el protagonismo: Julius Jenkins, Immanuel McElroy, Rashard Wright, Derrick Byass, que llegó a ser nombrado mejor jugador de su conferencia con Vanderbilt, y Adam Chubb, quien desde que saliera de Pennsylvania ha hecho toda su carrera en Alemania, con excepción de una exótica temporada en Corea del Sur. Otros cinco alemanes, el veterano Hammann, el alero internacional Zwiener, el joven pivot Seiferth, otro joven escolta, Staiger, y el nacionalizado Oliver Clay completan un equipo donde también juegan el turco de curioso apellido Cemal Nalga y dos veteranos del baloncesto europeo, el croata Jurica Golemac y el serbio Dojcin.
Llevaban unos años apagados, pero el ALBA Berlín es un histórico del baloncesto alemán a pesar de que no tiene muchos más de 20 años de historia. Eso sí, en esos veinte años han conseguido ya 15 títulos, incluídas 7 ligas consecutivas y el primer y único título europeo del baloncesto alemán: la Copa Korac de 1995. Histórico año en el que los alemanes, dirigidos por un Svetislav Pesic que empezaba a convertirse en un reputado entrenador, derrotaron al Cáceres de Manolo Flores y Rod Sellers, Raymond Brown, Paraíso o "el Petrovic de bolsillo" Jordi Soler en semifinales, para luego enfrentarse, y vencer, en la final al Stefanel de Dejan Bodiroga. Empataron a 87 en Italia gracias a los 34 puntos del ahora entrenador Sasa Obradovic y dieron la puntilla en su estadio con otros 34 puntos de Teoman Alibegovic, el máximo anotador de la historia de la selección eslovena, un jugador que dejó huella tanto en Alemania, como en Eslovenia, como en Italia donde, hasta hace poco, no sé si sigue, dirigía al Fortitudo Bolonia desde los despachos. Ellos dos, junto con Ademola Okulaja, Henrik Rodl, Patrick Falk, Behnke y Pesic en el banquillo, hicieron historia para los alemanes.
Esperemos que este año no tengan oportunidad de repetirlo.

Fotis Katsikaris


Yo pensaba que ya había escrito una entrada encabezada por Katsikaris, pero bueno. El entrenador griego que llegó para substituir a Bidorreta, está haciendo una labor digna de elogio. El equipo lleva una racha de victorias sorprendente, se ha acercado al play off de ascenso cuando lo cogió en descenso y está en la final four de Vitoria. Además, parecen haber cogido la confianza necesaria para ganar partidos en los segundos finales por costumbre. Sin embargo, el equipo todavía no es sólido. El juego es irregular y a Katsikaris se le ve nervioso en la banda, pero no se le puede reprochar nada cuando cogió al equipo ya completamente enfermo. Tengo confianza en que puedan superar al ALBA Berlín pero son novatos en todo esto a pesar de ser su segunda final four consecutiva y pueden ser capaces de lo mejor y lo peor.
En los últimos meses, Katsikaris ha renunciado a Blums como base, y Salgado, sobre todo, y Javi Rodríguez han mejorado su contribución sobremanera. Warren se muestra intermitente, Paco Vázquez ha recuperado protagonismo, Seibutis se gana sus minutos con lucha y Mumbrú dice que ha superado ya el bache. Por dentro, Moiso sigue siendo una incógnita cada partido, Hervelle proporciona tanto que da aún más lástima que no le entren los triples, Banic siempre es fiable y Markota ha renunciado a los puntos para defender y rebotear.
Por supuesto, yo animaré a estos, y quién sabe si romperé la hucha para acompañarles hasta la ciudad donde trabajo, pero lo digo por tercera vez porque me gusta ser pesado, los favoritos están en el Mediterráneo.

Neven Spahija


Yo reconozco que Spahija es una de mis debilidades en el banquillo. Desde que diera una lección de dirección en el Baskonia que no le sirvió para ganarse la renovación, a pesar de conquistar la Liga ACB y la Supercopa, y llevar al equipo a la final de la Copa del Rey y a la Final Four de la Euroliga.
Además de todo eso que consiguió en un solo año, Spahija tiene un palmarés para celebrarlo: campeón de la Liga Croata en las temporadas 99-00 y 00-01, de la Liga Eslovena 02-03, Liga Lituana 05-06 y Liga Israelí 06-07. Los años 2000 y 2001, la Copa Nacional Croata, el Torneo de apertura de la Euroliga en 2001, la liga Báltica en 2006, la Supercopa ACB en 2007 y la medalla de plata en el Mundial sub-22 en el año 2001 con la Selección Croata.
Si a eso le unimos una plantilla compensada y competitiva que cuenta con un pivot alto y con buenos fundamentos, Kosta Perovic, un veterano de la zona como Matt Nielsen, un joven talento francés del que se oirá hablar mucho, Nando de Colo, un tirador nato como Rafa Martínez y un alero brillante con capacidad para el trabajo como Víctor Claver, nadie puede negar que estos y los Kelati, Lishchuk, Simeón y Pietrus que los complementan, son el verdadero coco de la competición.
Los valencianos, además, tienen el bagaje necesario para jugar una final: han perdido dos y ganado una. Tras dos subcampeonatos en la desaparecida Copa Saporta, el equipo que por aquel entonces dirigía Francisco Olmos se enfrentó al Novo Mesto en la final de la Copa ULEB 2002-2003 y les ganaron. En los eslovenos destacaba el base Capin y otros dos jugadores que luego terminarían en la ACB, el americano Jamie Arnold y el tirador Marko Maravic. Sin embargo, los dos grandes partidos de Dejan Tomasevic le dieron la victoria a un equipo en el que destacaban nacionales como Rodilla, Luengo, Paraíso o Robles y un buen puñado de extranjeros como Kammerichs, Montecchia, Hopkins y Oberto.
Vuelvo a decirlo, son los favoritos a mi entender. No me importaría nada que los griegos les sorprendieran si estuviéramos hablando de un potencial rival para el Bilbao Basket en la final.

Ilias Zouros


No está nada mal lo que ha logrado el antiguo ayudante de Ioannidis en el Olympiakos desde que se hizo cargo del Panellinios, un equipo ateniense que duerme a la sombra del AEK de Atenas. Los griegos cuentan con 6 títulos de Liga, pero el más reciente se remonta a 1957. En el eaño 2000, regresaron a la A2 y desde entonces han ido creciendo en el baloncesto profesional.
Este año ya se enfrentaron a Bilbao Basket en la calificación por grupos y salieron escaldados de Bilbao con una derrota por 20 puntos, pero vencieron en Atenas, en su cancha, donde son bastante fuertes. Allí, de hecho, cimentaron su clasificación ante el Gran Canaria, al ganarlos por once y resistir después en el partido de vuelta.
Zouros, que ganó el campeonato de Asia y el premio al mejor entrenador de Asia en el año 2004 entrenando al equipo libanés donde ahora juega Booker Woodfox, ha formado un equipo veterano y aguerrido, luchador y agresivo, que nunca se rinde. Destacan los veteranos griegos Papamakarios, 30 años y ex del Olympiakos y de la cantera del Peristeri y Kalaitzis, de 34 años ya, base alto que jugara en Panionios, Milán, Panathinaikos y Aris y que ya ha ganado dos euroligas y 8 campeonatos nacionales. Ellos llevan el juego junto con el veterano base americano Roderick Blakney, que desde que dejó South Carolina ha hecho carrera en Europa, Rusia y Turquía, pero especialmente en Grecia, donde ha jugado además de para el Panellinios, para Iraklis, AEK, Maroussi y Olympiakos. Por cierto, quién sabe por qué, pero es internacional con Bulgaria. Por fuera, acompaña a estos un ex de la ACB, Devin Smith, de 27 años, que subiera a la máxima competición con el Bruesa para luego jugar una temporada más en Donostia. Por dentro, tienen a Chris Owens, familiar de Jesse Owens, y que por ello fue noticia cuando hace ya años fichara por el ALBA Berlín, el equipo de la ciudad donde su tío pasara a la historia en 1936. Junto a él, un veterano que ya ha pasado por España, Turquía, Francia y Grecia desde que dejara el Partizan, Djuro Ostojic y que en Bilbao demostró que aún le queda una buena mano, pero ya no es el mismo. Y por último, un griego de 25 años y 2'12, que jugó en la NCAA con Saint Louis además de en el Olympiakos y que en Bilbao demostró muy buenas maneras, Vougioukas.
Todos estos, más unos cuantos más, se enfrentaran en una semifinal al que para mí es el favorito, Valencia, y que es nuestro próximo protagonista.

Eduardo Portela


El veterano dirigente se las tiene con Bertomeu según parece. Supongo que serán asuntos de despacho. A Bertomeu, por lo poco que conozco, no le gusta el sistema de la ACB, creo que es por el número de equipos, pero no me hagas mucho caso, porque hablo de oídas. El caso es que el que fuera entrenador del FC Barcelona hace ya tantos años, se dedica desde que él mismo la fundara a presidir la ACB, la Asociación de Clubes de Baloncesto española y, desde tiempo más reciente, lo compagina con la de la asociación europea, la ULEB. Como ellos organizan la Eurocup y un asiduo de este blog me pidió que hiciera lo mismo que había hecho para la otra final four, a él le he puesto de entrada prólogo para las próximas cuatro en las que hablaré de los protagonistas que se reunirán en casa de Kerejeta para disputarse la segunda competición europea.
Por cierto, el señor Portela fundó hace ya muchos años la ACB con la ayuda de un histórico del baloncesto vasco llamado Josean Gasca y que ahora le da nombre a un estadio de baloncesto en Donostia. Sin embargo, pensé que era mejor dejar a Gasca para una futura breve historia del Askatuak y el baloncesto guipuzcoano que ya escribiré cuando me apetezca. Ahora, vamos con el análisis poco reputado y sencillo que hago de los cuatro equipos que se jugarán el título de la Eurocup.

viernes, 2 de abril de 2010

Panagiotis Yannakis


Creo que ahora le dicen Giannakis, pero bueno, como sea. El caso es que ya tiene al equipo en la final four. Y no era fácil, porque parecía tan fácil que era obligado, y también era obligado jugar la final de la Copa de Europa (o champions o como sea) para el Real Madrid de fútbol y no pudo ser.
El equipo de Yannakis es tan impresionante como el del Barcelona de Xavi Pascual. Ganadores natos como Papaloukas o Vujcic, con dos americanos de diferente trayectoria, un veterano como Scoonie Penn que desde que salió de Ohio State, ya ha visitado Serbia, Croacia, Turquía, Ucrania, Italia y Grecia, y un jovencísimo Patrick Beverly, que tras sorprender en las ligas de verano se fue al Dnipro y ganó el concurso de mates del All Star de la liga ucraniana. Y para trabajar, tres griegos del club del minero Stajanov, como Bouroussis, Mavrokefalidis o Glyanadakis. Junto a ellos el talento incontrolable de Schortsanitis, el israelí Halperin, el letal lituano que ya protagonizó grandes momentos con los Nuggets, Linas Kleiza y el ex-Hawks Josh Childress, un acontecimiento el año pasado que defraudó y que este año está haciendo una muy buena temporada. De postre, el talento de unos jóvenes sin vergüenza como Vasilopoulos, Papanikolau y Sloukas, y sobre todo el base con más talento y técnica de europa (esto es mío), Milos Teodosic.
No ganan la Liga de su país desde 1997 pero este año ya han ganado la Copa. Por cierto, ese mismo año de 1997 ganaron su copa de Europa, repitiendo el éxito griego de la anterior, la del Panathinaikos del tapón y de Dominique Wilkins, venciendo, de nuevo, al FC Barcelona en Roma, gracias a un entrenador en estado de gracia, Dusan Ivkovic, y un buen grupo de trabajadores como Tomic, Papanikolau, Sigalas, Fassoulas o Tarlac y el talento del gran David Rivers, que a sus 32 años, el número que llevaba Magic Johnson cuando el debutó en la NBA para darle descanso unos minutillos, dio la mayor satisfacción a la afición griega.
Si no juegan la final ante el Barcelona y dan un gran espectáculo de baloncesto, gane quien gane, será una sorpresa.
Y aquí termino el repaso a una final four que se hará extraña viendo que ninguno de los equipos participantes está entrenado ni por Messina ni por Obradovic.

Evgeny Pashutin


Substituir a Messina no era un reto fácil, y el CSKA de Moscú tampoco ha sido el equipo sólido que fue en los últimos años, pero aquí está una vez más. En la final four, gracias a haber derrotado al Baskonia de Ivanovic que nada pudo hacer ante un equipo bregado y ganador.
Y es que los rusos ya han ganado la Liga Europea (o Copa de Europa antes) en seis ocasiones. Las dos últimas en 2006 y 2008, y entre medias perdieron la de 2007. Tres finales consecutivas con dos victorias ante el mismo rival, el Maccabi y una derrota ante el Panathinaikos de los Batiste, Becirovic, Siskauskas, Hatzivrettas, Tsartsaris, Dikoudis, Diamantidis, Tomasevic o Vujanic, al que ganaron, esta vez sí, el año pasado.
En estos tres años, algunos protagonistas de esos títulos, como Vanterpool, Papaloukas, Van den Spiegel, Savrasenko, Zisis, David Andersen o Goree se fueron, muchos siguen: Smodis, Siskauskas, Holden, Langdon o Khryapa. Junto con Planinic y Mensah-Bosu y una nueva generación de jugadores nacionales que promete alegrías para las aspiraciones internacionales de Kirilenko, Kaun, Shved, Vorontsevitch, Keyru, Ponkhrasov, Zabelin, Kurbanov... Los rusos siempre son candidatos a la victoria final.
No se cansan de ganar, porque ya son 38 títulos entre las ligas soviéticas y rusas, pero este año antes de llegar a la final, tendrán que superar al gran favorito, el FC Barcelona, ya veremos si son capaces de plantarse ante una nueva oportunidad, y esta vez sin Messina ni Blatt.

Xavi Pascual


El joven entrenador de Viladecans se ha encontrado con un gran FC Barcelona que le ha regalado Chichi Creus. No le quiero quitar mérito, porque el tendrá gran parte de la culpa, pero la verdad es que la superioridad que ofrece el FC Barcelona este año es digna de elogio. Con un equipo que cuenta con un gran número de nacionales: Ricky Rubio, Navarro, Fran Vázquez, Grimau, Sada o Trias, y unos extranjeros de excepción, Lorbek, Morris, Mickeal, Lakovic, Basile, Ndong o Barton, la plantilla de los catalanas es casi inmejorable. Son los grandes favoritos. Y para ello, superaron la sorpresa de Ante Tomic en el Palau Blaugrana y sentenciaron al Real Madrid de Messina con dos victorias seguidas en su cancha. Un golpe de autoridad.
Ahora, tienen la oportunidad de igualar el éxito que Pesic consiguió en 2003. Cuando los Fucka, Bodiroga (como le echo de menos), Jasikevicius, Femerling, Dueñas, De la Fuente, Navarro y Varejao vengaron tantos años de finales perdidas. Han llegado con esta a once final fours, que se dice muy rápido. Quizás eso sea un peso, la larga tradición de trofeos que se quedaron tan cerca, pero este año ya han demostrado que pueden superar adversidades como los triples que no le entran a Navarro. Sin duda, todo el mundo apuesta por una final ante los de El Pireo con un París-Bercy que sirva de escenario para una nueva venganza porque París siempre se recuerda por aquel salto de Vrankovic que dejó a Montero con una dolorosa noche por delante.

Dusko Vujosevic


La primera para la sorpresa. Los 8,000 espectadores que se reunen en el Pionir Hall, una de las canchas más animosas de Europa, están que se salen de gozo. Después de un año, el anterior, donde el equipo demostró que tenía un porvenir excepcional, pero se temía por una nueva generación emigrada antes de tiempo, el equipo se sobre puso a las pérdidas de los talentos Tripkovic, Pekovic, Tepic y Velickovic y han dejado en la cuneta al Maccabi Tel Aviv para volver a lo grande a la élite del baloncesto europeo.
Ha pasado mucho tiempo desde que aquellos cinco puntos consecutivos de Tomás Jofresa se quedaran en nada con el triple milagroso de Djordjevic. Los de Lolo Sainz, con los dos Jofresa, Pressley, Corny Thompson, el bilbaíno Morales, Ruf y, por supuesto, Villacampa, habían dejado en la cuneta al Estudiantes de Miguel Ángel Martín, pero en la final se encontraron con un puñado de jóvenes descarados, encabezados por el MVP del torneo, Danilovic y Djordjevic que de la mano de Zeljko Obradovic y bien acompañados por Loncar, Rebraca, Nakic, Stevanovic o Dragutinovic se hicieron con el mayor galardón del baloncesto europeo. Era 1992, era Estambul y ya habían dejado fuera al Milán de Dawkins, Riva, Ambrassa, Pessina, Rogers, Pittis, Montecchi y Mike D'Antoni en el banquillo.
Quizás ése es el momento más álgido de la historia de este club, pero por él han pasado, antes y después, grandes jugadores como Dalipagic, Kicanovic, Beric, Drobnjak, Divac, Paspalj, Tomasevic, Kristic o el propio Zeljko Obradovic.
Han ganado 16 Ligas, 13 Copas, 1 Euroliga y 3 Copas Korac.
Ahora, de la mano del mago Vujosevic y del gran Danilovic en los despachos, han superado la pérdida de esos cuatro jóvenes y mantienen una nueva generación que hacen un gran baloncesto. Los Milosevic, Sinovec, Rasic, Lucic, Lesic, Besovic, Maric, Vesely, Dekic o Vranes, el más alto y el mayor de todos con 26 años, son un grupo joven que se complementa con dos veteranos comprometidos, Kecman y Petar Bozic, gran temporada y dos americanos que han sorprendidos, Lawrence Roberts, que estuvo en Baylor en los años del entrenador Dave Bliss, y el sorprendente base McCalebb.
En París tendrán enfrente al Olympiakos, pero seguro que los de Vujosevic se lo ponen difícil a los griegos. Que se lo pregunten a Eidson, si no.

Jordi Bertomeu


Jordi Bertomeu jefe de la Liga Europea o Euroleague, cuyo cargo es director ejecutivo o CEO o lo que es lo mismo el mandamás de la máxima competición Europea, la que dicen la mejor competición de baloncesto después de la NBA. Una auténtica máquina de hacer dinero que terminará del 7 al 9 de Mayo en París, en el Palais Omnisports de Paris-Bercy. Y ya tenemos los cuatro finalistas y como me siento culpable de hablar tanto de baloncesto americano y tan poco del europeo, cuando luego pongo a parir al primero y celebro el segundo, pues no voy a decir nada más del amigo Bertomeu y paso a editar cuatro entradas consecutivas, encabezadas por los entrenadores de cada uno de ellos, sobre los próximos cuatro equipos protagonistas en la fiesta del baloncesto europeo de París. Va.